El abogado constitucionalista Eduardo Barcesat consideró en Radio Gráfica que designar a Martín Soria como ministro de Justicia fue “una buena elección”, ya que “es un hombre que se ha destacado en la defensa de la institucionalidad y, en particular, por mejorar la administración de Justicia, que es precisamente la tarea pendiente que tiene el gobierno”.
“Las iniciativas que se dieron han quedado en una especie de pausa o suspenso. Me refiero a la reforma de la Justicia Federal Penal, me refiero a la falta de definición sobre qué vamos a hacer, si modificar la funcionalidad o número de miembros de la corte o si instituir este tribunal intermedio que va a tener a cargo el control de la sentencias calificadas como arbitrarias”, aclaró el abogado.
Y agregó: “A eso debemos agregarle las acciones que deben impulsarse desde el propio gobierno para que sea llevado al Consejo de la Magistratura las denuncias sobre aquellos jueces con ostensible mal desempeño. Era evidente que eso necesitaba de una presencia fuerte, de un compromiso importante para esos logros. Y de ahí la designación de Soria”.
Barcesat confesó que espera que desde el Ministerio de Justicia se lleve adelante una labor que permita “comenzar a reformular el Poder Judicial de la Nación” y “deconstruir el lawfare, esa perversa práctica institucional que se ha instalado en la administración de Justicia”.
Por otra parte, el abogado constitucionalista opinó que, para que haya “una iniciativa de fondo y totalizadora en lo que atañe al Poder Judicial, se requiere incuestionablemente de una reforma constitucional”.
“Recordemos que el proyecto político y económico de la Constitución de 1853 es el que se mantiene hasta hoy en día. De modo que bien vale la pena repensar que aquel proyecto agroexportador, que ha dado que ha dado los resultados que se esperaban, es absolutamente inadecuado para el siglo XXI, donde hay que poner los centros en otros temas, como por ejemplo la titularidad efectiva de la riqueza y los recursos naturales, que son del pueblo de la nación Argentina”, remarcó.
Además, Eduardo Barcesat hizo referencia a la situación de los presos políticos: “Hay decenas de planteos de nulidades sobre estas causas tramadas en el marco del lawfare. Todavía la Corte suprema no ha dicho una sola palabra, lo único que ha hecho es un silencio que permite la permanencia de estas causas. Este es uno de los problemas fundamentales”.
“Si el propio Poder Judicial es el soporte mayor de la estructura del lawfare, entonces no podemos pedir que nos de estado de derecho y supremacía constitucional”, destacó.
- Entrevista realizada por Lucas Molinari en Punto de Partida (lunes a viernes de 8 a 10hs)
- Redacción por Erika Eliana Cabezas
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