Crisis política en Perú y Ecuador. Martín Vizcarra, presidente del Perú, disolvió el Parlamento ante un intento de golpe parlamentario por parte del fujimorismo. Mientras en Ecuador se realizan masivas movilizaciones campesinas y estudiantiles ocupan Quito, a raíz del plan de ajuste y aumento de combustibles que impulsó el gobierno de Lenín Moreno.
Carlos Aznarez, director del periódico Resumen Latinoamericano, dialogó con Gabriel Fernández sobre Perú: “hubo un intento de golpe parlamentario por parte del fujimorismo y la bancada opositora al gobierno de Vizcarra. Intentaron reformar el Tribunal Constitucional, aumentando la entrada de 8 o 9 miembros más ligados al fujimorismo. El objetivo era que el Tribunal logre la impunidad para los actos de corrupción de Keiko Fujmori, hija de Alberto Fujimori, y de otros congresistas que tienen denuncias de corrupción. Muy al estilo del parlamento brasilero”.
Agregó “esto fue impedido por la decisión de Vizcarra de disolver el Parlamento. Una acción que fue respaldada con una salida masiva en todo el Perú de las organizaciones sociales, populares y estudiantiles. Si bien, Vizcarra no es un hombre del campo popular, tomó una medida acertada. Más que respaldar a Vizcarra, salieron a respaldar la medida. El mandatario, inmediatamente, convocó a elecciones para el 26 de enero del 2020. Ahí se va resolver el tema y yo creo que para el lado del campo popular”.
El director de Resumen Latinoamericano, refirió sobre algunas posibles personalidades sobresalientes de cara a las próximas elecciones peruanas “hay algunos gobernadores muy interesantes como Walter Aduviri, que está preso hace poco, que cuenta con el apoyo de la región de Puno que lo eligió estando en la clandestinidad. Aduviri fue perseguido por ser uno de los líderes de la lucha contra la megaminera. Y el otro es Vladimir Cerrón, otro hombre que gobierna una localidad andina que está en la línea chavista y revolucionaria”.
Sobre la situación de Ecuador, Aznarez expresó “primero fueron los transportistas, después la gente se dió cuenta que el aumento de los combustibles iba a reflejarse en los precios de la canasta básica. Salieron trabajadores y estudiantes. Enseguida se decretó el paro por tiempo indefinido del movimiento indígena. Están llegando a Quito, donde 5000 trabajadores y estudiantes los esperan bloqueando la autopista para que los militares no puedan interceptarlos”.
En Ecuador existe una relación de las organizaciones sociales e indígenas con los sectores de las Fuerzas Armadas; al respecto señaló que “hay militares que depusieron sus armas en algunas zonas y empezaron a marchar con los campesinos y los indígenas. Lo que buscan es derrocar a Lenin Moreno. Para el movimiento popular ecuatoriano, Lenin no puede ser más un interlocutor válido porque lo consideran un hombre del Fondo Monetario Internacional (FMI)”.
En relación a un posible retorno de Rafael Correa, Aznarez explicó que “muchos de los sectores que se están movilizando no quieren ni Moreno ni Correa. El tema con Correa fue la mala relación con el movimiento indígena. No se pudo arreglar, hubo sectores del movimiento indígena que se dividieron. Hoy quien está dirigiendo esta gran movilización es la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) y los estudiantes”; además resaltó “por ahora no hay un liderzgo político, salvo el liderazgo de los dirigentes sociales”.
El periodista, finalmente hizo hincapié en la relación entre Perú y Ecuador en medio de la crisis que viven “la salida de Moreno puede generar un rebote fuerte en Perú, porque los dos países tienen una relación en las movilizaciones y en los planteos políticos. Es un momento interesante”.
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