Una elección histórica, extremadamente polarizada, el candidato de Perú Libre, Pedro Castillo, se impone por una diferencia apretada sobre Keiko Fujimori de Fuerza Popular. Escrutadas el 95,7% de las actas, Castillo estiró la diferencia a 87.824 votos sobre un total de 18.119.889 de sufragios.
El dirigente sindical docente de 51 años, Pedro Castillo, está a un paso de convertirse en el nuevo presidente de Perú. La diferencia de votos es mínima, pero logró consolidarse en las últimas horas tras revertir un conteo inicial que favorecía a Keiko Fujimori, hija de Alberto Fujimori, presidente entre 1990 y 2000 que dejó su cargo entre graves denuncias de corrupción y una aguda crisis social con más de la mitad de la población bajo la línea de pobreza.
“Queridos personeros y personeras, para mí, héroes y heroínas de la democracia, aún faltan votos de algunos rincones de nuestro amado Perú y del extranjero. Por eso, debemos estar muy atentos para defender la voluntad popular hasta contar el último voto. Seguimos adelante“, escribió con cautela Castillo en su cuenta de Twitter este lunes por la tarde. El día previo, desde Perú Libre habían denunciado una intencionalidad de favorecer a Keiko Fujimori en la primer parte de la carga de datos, además del llamado a extremar los controles en el conteo de votos.
Las elecciones se dieron en un Perú convulsionado institucionalmente, con una imponente crisis sanitaria y económica. En noviembre del 2020 fue destituido por el Congreso el entonces presidente Martín Vizcarra, días después ocurrió lo mismo con Manuel Merino, asumiendo finalmente Francisco Sagasti. Tres presidentes en el transcurso de una semana. No son los cinco que tuvo Argentina tras el 20 de diciembre de 2001, pero habla de una crisis de representatividad profunda.
A nivel sanitario desde el comienzo de la pandemia suma 180.000 fallecidos a raíz del coronavirus con una economía que se desplomó un 11,1% en el año. El peor registro en Sudamerica.
STELLA CALLONI: “CASTILLO SURGE DE LAS ENTRAÑAS DE UN MUNDO IGNORADO E INVISIBLE”
La periodista y analista internacional, Stella Calloni, en diálogo con Radio Gráfica analizó las elecciones en Perú. “La Organización de Estados Americanos (OEA). Almagro quiso hacer en esta elección lo que le hicieron a Evo. No habían llegado los votos de las zonas montañosas y selváticas, donde se da la mayor concentración de fuerzas de Castillo. Lo contuvieron otros observadores que estaban ahí, si no hubieran anunciado que ganó Keiko”.
“A diferencia de Ollanta Humala (presidente del 2011 al 2016), Castillo surge de las propias entrañas de ese mundo tan ignorado e invisible. Hay cosas que no quieren ver, pero de pronto aparecen, como ocurrió en Chile”.
“De confirmarse la victoria, deberá lidiar con las Fuerzas Armadas y con las bases que Estados Unidos tiene en Perú. Hay cuatro bases militares en sitios estratégicos y centenares de establecimientos para medir fenómenos naturales pero que aprovechan para instalar radares y equipamiento militar. Eso ocurre en Colombia, Perú y Panamá. Eso hace más complicada la situación”, describió.
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