Este martes 28 de octubre falleció el dirigente gremial boliviano Orlando Gutiérrez tras estar varios días internado producto de una golpiza. Presuntamente fue atacado por un grupo de personas que rechazaban el resultado de las elecciones del 18 de octubre, en las que el Movimiento Al Socialismo obtuvo una amplia victoria y consiguió volver al poder. David Ticona, periodista del sindicato de prensa de la ciudad de El Alto, La Paz, informó para Radio Gráfica lo sucedido.
Ticona comentó en primer lugar que, tras la muerte del Secretario Ejecutivo de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (FSTMB) Orlando Gutiérrez, “la ciudad de La Paz ha amanecido con detonaciones de dinamita como señal de duelo. La gente está molesta, conmocionada, por la muerte de un gran dirigente minero”.
Caracterizó que Gutiérrez “era el máximo representante de los trabajadores mineros. Un joven que se destacó por su discurso y por su resistencia contra el golpe de estado. Era un hombre muy esclarecido, ideológicamente bien ubicado. Salió en defensa de la democracia en momentos en que muchos se ocultaban o preferían estar autosilenciados. Él sacó la cara y le dijo a [Jeanine] Añez que tenía dos caminos: irse por la democracia, a través de una elección, o salir a través de una convulsión social. Su asesinato fue un pase de factura, un operativo por parte de los grupos irregulares con los que Añez consolidó el golpe el año pasado”.
El periodista boliviano indicó que “según trascendidos, nada oficial, lo habría atacado una patota cuando volvía a su casa después de seguir el recuento de votos por televisión. Ahora es incierta la situación, no hay nada concreto. La policía indica que va a iniciar la investigación de oficio, porque estaba el rumor de que ya estaba reestablecida su salud. Pero de la noche a la mañana nos enteramos de que falleció. Hasta lo que pasó en la clínica nos preocupa. ¿Cómo fue atendido? Esto tienen que esclarecer las autoridades, cómo falleció. Lo cierto es que el sector minero ha decretado noventa días de duelo”.
Ticona manifestó que el panorama “es preocupante porque todos los que resistimos al golpe de estado podemos sufrir las mismas consecuencias que Orlando. Es una especie de venganza y advertencia. Justo en este momento, en el que hordas fascistas están golpeando la puerta de los cuarteles para que los militares asuman el poder desconociendo la voluntad del pueblo. Pareciera que es parte de un plan conspirativo. Hay rumores de que se está acercando un golpe de estado, pero las cosas están inciertas. Esperemos que toda la transición sea normal. Aunque hay una duda. Áñez se ha manchado las manos con sangre boliviana, y eso no puede quedar impune. Si ella traspasa el mando como dice la constitución, lo primero que va a pasar es que va a ir a la cárcel, y ella y sus ministros lo saben. La única forma de evitarlo es haciendo un autogolpe que les permita salir del país“.
Finalmente, Ticona señaló, sobre el estado de las fuerzas armadas y la posibilidad de un cuartelazo, que “extraoficialmente se ha escuchado que dos generaciones de las formaciones iban a ser suspendidas, y que la tercera es la que va a asumir el mando en los cuarteles. Eso está afectando la moral de los generales. También han hecho correr el rumor de que se van a disolver la policía y el ejército. Eso no es posible, porque existen de acuerdo a la constitución. Son rumores para generar una corriente de opinión que justifique un golpe de estado”.
- Entrevista realizada por Lucas Molinari en Punto de partida (lunes a viernes de 8 a 10)
- Redacción por Martín Gorojovsky
Discusión acerca de esta noticia