“Hace 13 años que no se garantiza la vida de las personas de la Villa 21-24 y Zavaleta que todos los días están expuestas al riesgo eléctrico”, afirmó Paz Ochoteco, coordinadora de la Fundación TEMAS, en diálogo con Punto de Partida con Radio Gráfica. La referente denuncia los riesgos que viven los vecinos del barrio popular más extenso y poblado de la Ciudad de Buenos Aires.
“En este barrio, la electricidad no es sólo un recurso indispensable para la vida cotidiana, sino también una fuente permanente de riesgo” detalla el informe elaborado por la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ), la Fundación TEMAS y el Observatorio Villero, que expone la amenaza estructural con la que conviven los 80.000 habitantes de la Villa 21-24 y Zavaleta, de los cuales el 40% son niños, niñas y adolescentes.
El informe se refiere a “riesgo eléctrico” como “la posibilidad de sufrir daños físicos, materiales o incluso la pérdida de la vida como consecuencia del contacto directo o indirecto con instalaciones eléctricas inseguras”. Los datos obtenidos revelan que el 93% de las viviendas están expuestas al riesgo eléctrico por no contar con instalaciones eléctricas intradomiciliarias seguras, el 36% refiere sufrir cortes de suministro al menos una vez por mes, producto de un servicio intermitente, inestable y sin garantías de seguridad. el 28% de los hogares perdió electrodomésticos o herramientas de trabajo, y el 10% sufrió incendios producto de fallas en las conexiones eléctricas.

“Hace un tiempo, en el barrio, Gilda estaba sacando agua del pasillo de su casa durante una tormenta y murió electrocutada. También un nene muy chiquito estuvo un mes internado, más de una semana en coma, por una descarga. Frente a una instalación deficiente, quienes quedan más expuestos son los niños y las personas con discapacidad, ellos son los más vulnerables.” Recordó Ochoteco. El relevamiento detalla que el 68 % de las viviendas tiene filtraciones y el 75 % humedad, lo que aumenta el peligro de contacto del agua con las instalaciones eléctricas.
Sin embargo, la exposición al riesgo eléctrico no es reciente. “Se da en el marco de la causa por riesgo eléctrico que está en el juzgado de la doctora Elena Liberatori, que tiene 13 años de incumplimiento y que debería exigir al Gobierno de la Ciudad que haga las obras para mitigar el riesgo, especialmente en lo que tiene que ver con infraestructura”, sostuvo la coordinadora. En 2010, vecinos y vecinas, junto al Ministerio Público de la Defensa y ACIJ, presentaron una acción de amparo colectivo contra el Gobierno porteño. El ENRE ya había advertido entonces que el riesgo era “general, estructural e inminente”.
El Juzgado Contencioso Administrativo y Tributario N° 4, falló a favor de la comunidad y ordenó al Gobierno de la Ciudad elaborar un “Proyecto Eléctrico Adecuado”. El proyecto consiste en “aumentar la oferta de suministro eléctrico y duplicar la cantidad de transformadores, hoy la Villa 21-24 tiene 28 y necesita el doble de los que tiene” Afirmó Ochoteco. La sentencia fue confirmada en 2016 y 2018, pero el Gobierno porteño la incumplió sistemáticamente.

La preocupación incrementa luego de que a comienzos de 2025, el Gobierno de la Ciudad presente un proyecto que “no detalla los cronogramas de obras ni plazos de trabajo, por lo que es muy difícil entender cómo lo van a ejecutar” añadió. Lo que genera que se posterguen nuevamente las obras.
Las alarmas se encendieron también luego de que el presupuesto 2026 para el Instituto de la Vivienda de la Ciudad (IVC) es el más bajo de los últimos 14 años. “El gobierno actual está pretendiendo asignar solo el 0,64% del presupuesto total de CABA para el IVC, para todos los barrios y para todas las obras pendientes. Realmente hay una intención deliberada, sistemática e histórica de postergar especialmente a la Villa 21-24.” concluyó.










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