El ministro de Economía anunció un conjunto de medidas para “impulsar el consumo interno y la inversión” a través de un incremento del 30% en los montos de compras en cuotas con tarjetas de créditos y del 25% para las operaciones de pago en una sola cuota. El objetivo, explicó, es “llevar alivio a las familias argentinas y garantizarles un mayor acceso al crédito”.
Presentamos un conjunto de medidas junto a representantes de entidades bancarias, para llevar alivio a las familias argentinas y garantizarles un mayor acceso al crédito. De esa forma, se sostiene e impulsa el consumo interno y se aumenta la inversión en todo el país. pic.twitter.com/pFN7BRCcpB
— Sergio Massa (@SergioMassa) May 22, 2023
Durante la reunión con las entidades financieras Massa dijo estar convencido de que “el acceso a crédito nos puede ayudar a compensar parte de esa caída del PBI por la sequía”. A su vez, valoró “la decisión de los bancos públicos y privados de capital nacional que ayudan a consolidar el consumo a partir de aumentar el cupo de endeudamiento de crédito. Es un aporte muy valioso del sistema financiero, que sostengan esta iniciativa y que nos permitan que se vean beneficiados los consumidores del Ahora 12 y en un pago. Y las pymes, porque cuando aumentan la capacidad de crédito en cuenta corriente se le mejora el capital de trabajo para sostener empleo”.
El economista Juan Valerdi, consultado por este medio, explicó que el reajuste de los montos para financiar en cuotas se habría realizado de todas maneras de forma automática por las entidades bancarias. Por otro lado, señaló que seguramente existe “algún tipo de garantía por parte del Estado y del Banco Central en caso de incumplimientos”: “Esa es la ventaja para los bancos, que no dan puntada sin hilo. Porque en algún momento cuando haya ajuste, sea porque lo aplique Massa o la derecha en caso de que gane, puede haber un montón de gente que tenga problemas para pagar su tarjeta, y si el Estado está dando algún tipo de garantía que no nos cuenta, me preocupa bastante”.
“Si el Estado está dando algún tipo de garantía que no nos cuenta, me preocupa bastante”.
Por otra parte, lamentó que se esté promoviendo el endeudamiento social: “Los argentinos, en general, comparados con muchos de los países desarrollados e incluso con países de la región como Chile o Brasil tienen un nivel de endeudamiento personal bastante bajo, pero esto tiene que ver con que los bancos no dan préstamos, las tasas son delirantes, y el préstamo hipotecario prácticamente no existe. Ahora se intenta facilitar el endeudamiento de la población porque no se puede mejorar los ingresos reales por la inflación, lo que es patear el problema para adelante”, explicó el especialista.
El caso chileno es un ejemplo en cuanto a las consecuencias del endeudamiento social: “Todo funcionaba muy bien hasta que llegaron al tope y terminaron en el estallido que vimos en los últimos años, porque ya empezó a crujir ese sistema de tener la deuda siempre al tope del cuello, lo podemos ver también en EEUU”, agregó.
Además, Valerdi se refirió a las disputas entre los diferentes sectores del poder financiero y el impacto que eso puede ocasionar en un año electoral: “La guerra económica va a ir creciendo, pero no solamente en agosto y en octubre que son las elecciones, sino también para el cierre de listas, a fines de junio”, pronosticó. En esa misma línea consideró: “si no hay casi nada de reservas es como ir a la guerra con dos escarbadientes”.
“Si no hay casi nada de reservas es como ir a la guerra con dos escarbadientes”
Cabe señalar que el Banco Central en lo que va del año ya perdió US$ 11.536 millones por la falta de ingresos en exportaciones, tocando un piso de US$ 33.062 millones, el más bajo desde 2016.
En esa disputa juegan “algunos aliados de Massa, y enemigos muy fuertes, tanto de Massa como del Frente de todos”: “Hay una parte del poder económico financiero que preferiría que no termine todo en un desmadre y que probablemente les gustaría que Massa fuera presidente. Pero hay otros que quieren que el Frente de Todos no termine el mandato y que Massa termine con una inflación desbocada aunque eso se lleve puesto a los 47 millones de argentinos, así pueden llegar desde la derecha con un plan salvador como en su momento fue la convertibilidad”, finalizó.
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