Por Úrsula Asta y Leila Bitar
La Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) nació en Caracas, Venezuela, los días 2 y 3 de diciembre de 2011. Allí se constituyó de manera oficial este organismo que reúne a las 33 naciones de la región, siendo Estados Unidos y Canadá los países del cotinente americano que no forman parte.
Por aquellos días fue Hugo Chávez quien brindó el discurso inaugural del encuentro fundacional de Celac. “¿Qué hay diferencias entre nosotros, entre los Gobiernos, entre las corrientes políticas que libremente van y vienen por este Continente, y que hoy son Gobierno, y mañana no? ¿O que tienen una fuerza, a lo mejor, determinante en un Parlamento, o en Poderes constituidos de aquí y de allá…? ¡Sí, reconozcamos eso! Y eso es válido, y eso es natural, en un Continente donde reina la Democracia. ¡Ah! Pero tenemos que aprender a convivir con esas diferencias. Convivir con esas diferencias, aceptarlas, y buscar la mejor manera de complementarnos. Y poner allá, por delante, los Objetivos Supremos que la CELAC comienza a perfilar”, dijo entonces.
“Nosotros necesitamos, en primer lugar nosotros mismos, los que estamos al frente de las Instituciones de nuestros Estados… y dije Estados, fíjense, no Gobiernos… ¡Estados! Comunidad de Estados. No es una Reunión de Gobiernos nada más… ¡Estados! Pero nosotros tenemos que hacer un esfuerzo mayor para incrementar la Conciencia. La Conciencia, para darnos cuenta de que este Camino es el único Camino, con sus variantes, con sus diversidades… la Unidad entre nuestros Pueblos, entre nuestros Estados, nuestras Repúblicas, nuestros Gobiernos. Aceptando, insisto, y respetando, respetando nuestras diferencias. Sin permitir que la intriga cunda entre nosotros. Sin permitir que la cizaña venenosa vaya a impedir, una vez más, el esfuerzo unitario”, sostuvo Chávez entre sus reflexiones hace 12 años atrás.
Su discurso tiene vigencia en el sentido de algunos debates que tuvieron lugar en esta VII edición de la Celac sobre la continuidad de una Comunidad internacional que logre sobrevivir a los cambios de gobierno. El uruguayo Luis Lacalle Pou dijo en conferencia de prensa, por ejemplo, que esto no debía ser un club de amigos de gobiernos con signo político similar, se refirió a varios de sus pares como “proteccionistas” y subrayó su interés por establecer tratados de libre comercio.
El colombiano Gustavo Petro sostuvo durante el plenario de la Cumbre que se debía “pasar de la retórica a la acción” y en conferencia le respondió a Lacalle Pou: coincidió en que esto no debía ser un club de amigos “como le había sucedido al Grupo de Lima”, foro de simpatía del oriental.
El venezolano Nicolás Maduro, por video, llamó a una mayor institucionalización de la Celac al plantear la necesidad de una “estructura organizativa propia, que tenga secretaría y consejos de ministros por área, como la Unión Europea y la Unión Africana”.
Veamos.
Esta VII Cumbre inició en la mañana del martes 24 de enero en el hotel Sheraton de Buenos Aires con las palabras del presidente Alberto Fernández y las de su canciller Santiago Cafiero en un balance de la Presidencia pro témpore de la Argentina.
Hubo ausencias relevantes -como fue el caso del mencionado Nicolás Maduro, que canceló su participación a último momento debido a maniobras que, como informó el gobierno bolivariano, tenían el objetivo de “llevar a cabo una serie de agresiones en contra de nuestra delegación”- y hubo presencias nebulosas -como la delegación peruana del discutido gobierno de Dina Boluarte tras el golpe a Pedro Castillo, así como la del asesor para las Américas, Chris Dodd, en representación del presidente de Estados Unidos, Joe Biden-.
El gobierno argentino había realizado invitaciones a sus pares Biden y al chino Xi Jinping. En el caso del segundo, participó de manera virtual con un discurso en el que hizo referencia al multilateralismo, a la cooperación Sur Sur y a las relaciones Celac-China:“La Celac ya se ha convertido en una fuerza propulsora indispensable para la cooperación global Sur-Sur. Constatamos con satisfacción que bajo el liderazgo de Argentina y otros países, la Celac ha persistido en practicar el multilateralismo y jugado un papel importante en la defensa de la paz regional, el fomento del desarrollo compartido y la promoción de la integración regional”.
“China siempre apoya la integración regional de América Latina y el Caribe, otorga alta importancia al desenvolvimiento de las relaciones con la Celac, y la considera como un importante socio para consolidar la unidad entre los países en desarrollo e impulsar la cooperación Sur-Sur. Teniendo presentes precisamente estas aspiraciones originales, China ha venido trabajando con América Latina y el Caribe para reforzar constantemente la construcción del Foro China-Celac y promover la entrada de las relaciones China-América Latina y Caribe en una nueva era caracterizada por la igualdad, el beneficio mutuo, la innovación, la apertura y el bienestar para los pueblos”, sumó Xi Jinping.
“Un creciente número de países de América Latina y Caribe han venido estableciendo o restableciendo relaciones diplomáticas con China, realizando cooperaciones para fomentar la construcción conjunta de la Franja y la Ruta de alta calidad, y apoyando y participando en la Iniciativa para el Desarrollo Global y la Iniciativa para la Seguridad Global, trabajando de la mano con China en la construcción de la comunidad de futuro compartido. Actualmente, el mundo ha entrado en un nuevo período de turbulencias y transformaciones. Sólo con el fortalecimiento de la unidad y la cooperación, podremos hacer frente común a los desafíos y superar juntos las dificultades coyunturales”.
“Estamos dispuestos a seguir solidarizándonos con los países de la región y avanzando con manos cogidas, realzando los valores comunes de la humanidad de la paz, el desarrollo, la equidad, la justicia, la democracia y la libertad, fomentando la paz y el desarrollo mundiales, promoviendo la construcción de la comunidad de futuro compartido de la humanidad, y abriendo con esfuerzos aunados un futuro aún más brillante”, cerró el Chino.
El cubano Miguel Díaz Canel se refirió a la exclusión que sufrió su país, así como Venezuela y Nicaragua, en la Cumbre de las Américas que tuvo lugar en junio del año pasado en Los Ángeles. Planteó que que Estados Unidos “excluyó, fracturó e ignoró” el sentimiento de unidad y soberanía de los pueblos latinoamericanos, y sostuvo que existe un orden internacional injusto y expoliador. “En Washington persiste el empeño de dividirnos, estigmatizarnos y subordinarnos a sus intereses, a casi 200 años de promulgarse la Doctrina Monroe. Así lo evidenció la excluyente cita hemisférica realizada en Los Ángeles donde, abusando de su poder de anfitrión y cerrando ojos y oídos al reclamo de la mayoría, excluyó, fracturó e ignoró”.
“Siempre acompañaremos las nobles causas: la independencia de Puerto Rico; la estabilidad y la paz en Haití, sobre la base del pleno respeto a su soberanía; el proceso de paz en Colombia; y el derecho de Argentina sobre las Islas Malvinas, Sándwich del Sur y Georgias del Sur y los espacios marítimos circundantes”. “Cuenten también con Cuba como Presidente del Grupo de los 77 más China durante este año, en el que trabajaremos sin descanso para representar dignamente los intereses de las naciones del Sur”, afirmó.
El chileno Gabril Boric fue uno de los que se pronunció sobre la situación en Perú: “No podemos ser indiferentes cuando hoy en día en nuestra hermana nación del Perú personas que salen a marchar y a reclamar lo que consideran justo terminan baleadas por quien debiera defenderlas”. “Más de 50 personas han perdido la vida y eso nos debería escandalizar. Es inaceptable también que las universidades de América revivan las tristes escenas de los tiempos de las dictaduras del Cono Sur como sucedió recientemente con el violento ingreso de la policía a la Universidad de San Marco”, añadió, asegurando que “frente a estos atropellos, reitero la voluntad de Chile a contribuir en todos los espacios multilaterales, para acompañar un dialogo inclusivo, capaz de construir gobernabilidad democrática y asegurar el respeto a los derechos humanos”.
“La política de la exclusión no ofrece resultados auténticos ni durables. Así lo demuestra la historia de nuestra América Latina y el Caribe con el ignominioso bloqueo de Estados Unidos a Cuba y más recientemente a Venezuela”. “Manifestamos nuestro apoyo a la tradición pacífica, democrática y decidida por el pueblo de Venezuela a la crisis política y humanitaria que golpea el país y expresamos nuestra voluntad para colaborar en el diálogo entre los distintos sectores del país para encontrar una salida que permita la realización de elecciones libres, justas y transparentes con supervisión internacional el año 2024“, sumó.
Nicolás Maduro, por su parte, explicó: “Hubiera querido estar físicamente, directamente, en el sitio de los acontecimientos, como siempre hemos estado, como siempre vamos a estar, razones que se escapan a nuestra voluntad, de la persecución permanente, de la amenaza permanente, de las emboscadas, me hicieron tomar la decisión correcta y justa de no caer en las provocaciones que pretendían manchar este momento especial para America Latina y el Caribe. Pero la voz de Venezuela está presente, somos un estado fundador de la Celac. Como canciller del comandante Hugo Chávez, recuerdo haber participado en todos los procesos que dieron inicio a este momento de organización regional que es la Celac”.
“Como dijo el libertador Simón Bolívar, para nosotros la patria es América, como dijo José Martí, Nuestra América, asumirnos como Patria Grande, y asumir la política desde la gran política, con P mayúscula, la política de la unión en la diversidad. Respetando las características de los modelos políticos económicos y sociales de cada país, el programa de cada liderazgo que esté al frente, haciendo un gran ejercicio de tolerancia e inclusión que nos lleve a la unión verdadera en la diversidad ideológica”.
Se refirió, además, a la integración de un sistema financiero y monetario: “Compartimos la propuesta que ha hecho el presidente Lula da Silva de iniciar la construcción de un sistema monetario latinoamericano caribeño, que nos lleve a una moneda y a un compartir de los sistemas financieros y monetarios de la región. Hay que dar el primer paso fundacional para andar un camino que tiene que ser irreversible para la integración completa, económica, comercial, financiera y monetaria”.
La hondureña Xiomara Castro definió: “Es un momento crítico en nuestra región, frente al fracaso de la OEA, hoy la Celac es más necesaria que nunca. La derecha no descansa, cínicamente hablan de desarrollo y planifican golpes de estado, a través de su maquinaria mediática, el boicot económico y la persecución política lawfare, mantiene una agresión permanente contra nuestros pueblos. Estamos librando una batalla común contra el neoliberalismo que a su paso solo ha dejado pobreza, hambre y miseria. Solo unidos podemos blindarnos de los ataques feroces del neofascismo que pretende imponer los intereses egoístas de las grandes potencias económicas a nuestros pueblos”.
“Es fundamental que asumamos un papel protagónico de multipolaridad y que denunciemos las políticas asimétricas de la globalización que nos arrastra a sufrir las consecuencias de la guerra como la de Ucrania, sometiendo a nuestro pueblo a niveles intolerables de injusticia pobreza y corrupción”.
“Condenamos el golpe de estado en Perú y la agresión a la que está sometido el pueblo peruano, nuestra solidaridad con el presidente legítimo electo Pedro Castillo y demandamos su inmediata liberación”.
El derrocado Pedro Castillo, por su parte, se hizo eco de lo que plantearon en torno a su situación y la de Perú y, a través de sus redes sociales, agradeció a los mandatarios de Colombia, Gustavo Petro, de Honduras, Xiomara Castro, de México, Andrés Manuel López Obrador, por su “firmeza” y “valentía” por condenar los sucesos en Perú, su “detención arbitraria” y por “exigir garantías constitucionales”. También agradeció al argentino Alberto Fernández, al cubano Miguel Díaz Canel, al boliviano, Luis Arce, al chileno, Gabriel Boric, y al venezolano, Nicolás Maduro, por abordar el tema y su preocupación ante la realidad peruana.
Hermanos: comparto esta carta donde me dirijo a los presidentes, primeros ministros y delegaciones nacionales presentes en la VII Cumbre de la @PPT_CELAC y a todos aquellos que representan a los pueblos hermanos de la Patria Grande. #CELACArgentina2022 🇦🇷 pic.twitter.com/NiuSKGoSMg
— Pedro Castillo Terrones (@PedroCastilloTe) January 26, 2023
El colombiano Gustavo Petro, que centralizó sus ideas en torno a repensar temas de medio ambiente, cambio climático e industrialización, puntualizó que la región tiene la “esponja” contra los gases de efecto invernadero, el cuidado de la Amazonía y la necesidad de generar una gran red energética de unidad.
Luego, en la conferencia de prensa que brindó durante la Cumbre reflexionó: “La convención interamericana debería respetarse y no entiendo cómo hay un presidente preso sin que haya sentencia en contra, que haya perdido sus funciones constitucionales que adquirió a través del voto popular sin que haya una sentencia de un juez penal en su contra”.
También dijo que “el conflicto actual en Europa en el mismo sitio donde los nazis mataron a 20 millones de personas en la Segunda Guerra Mundial” debería a tener a “América Latina, en vez de estar pensando en que bloque militar juega, si el ruso o la OTAN, debe exigir la paz. Que se construyan los diálogos pertinentes para que la guerra se acabe, por eso ningún arma rusa de nuestra tierra va a ser usada en ese conflicto”.
“En algún momento hubo una crisis entre Colombia y Venezula porque los venezolanos compraron aviones rusos y la respuesta fue meter a Colombia en una categoría que no he podido entender, llaman socio estratégico de la OTAN, entonces quieren reproducir en la esquinita norte del continente lo que viven los rusos y ucranianos. El espacio latinoamericano no es para eso, nosotros debemos busca nuestros propios caminos y no estar dependiendo de los juegos de la política mundial”, respondió consultado sobre un llamado que le hizo la jefa del Comando Sur estadounidense Laura Richardson sobre que Colombia entregue el equipamiento militar de origen ruso que el país posee.
“Me parece que la integración debe ser autónoma de los cambios políticos de un país que nadie puede predecir. Las instancias han pecado de homogeneidad ideológica, y así no se puede hacer una integración. El Grupo de Lima, que buscaba la caída del gobierno venezolano, no existe porque todos sus gobernantes de derecha ya no están. La OEA siendo una institución de mucho peso, en la última etapa decidió vincularse a ese tipo de parcialidad ideológica, por el cálculo de mantenerse en la secretaría, si los tiempos viraban a la derecha decidían atacar a gobiernos que estaban a la izquierda y terminó fraguando golpes de estado. Hay que discutir si la idea se puede fortalecer, o si esta instancia por la cual yo apostaría más, la Celac, si logra ser autónoma respecto de los cambios políticos de los países, podría guiar procesos que nos vincule independientemente de nuestras transformaciones. Yo creo que deberíamos considerar a la Celac como el verdadero espacio de integración latinoamericana”.
El brasileño Lula Da Silva, que tuvo una nutrida agenda bilateral con Argentina, durante su discurso en Celac alertó sobre “las tentaciones autoritarias que hasta hoy desafían a la democracia” en la región y “las amenazas a la democracia representativa como forma de organización política y social”. “Quiero aprovechar esta oportunidad para dar las gracias a todos y cada uno de los que han estado al lado de Brasil y de las instituciones brasileñas, en estos últimos días, en repulsa de los actos antidemocráticos que tuvieron lugar en Brasilia. Es importante destacar que somos una región pacífica que rechaza el extremismo, el terrorismo y la violencia política”, agregó.
Siendo la primera vez que hay delegaciones de los 33 países integrantes de América Latina y el Caribe, las conclusiones oficiales se emitieron en la Declaración de Buenos Aires en 100 puntos. A 200 años de la Doctrina Monroe, la estrategia integradora y de unidad soberana en la región es aún un desafío. Los trazos de la Cumbre en Buenos Aires, solo una muestra.
Cumbre Celac 2023
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