El dirigente político y social Luis D’Elía brindó en Radio Gráfica su mirada acerca de la realidad nacional e internacional, la figura de Sergio Massa y el rol de Alberto Fernández, a quien llamó “compañero” a pesar de diferencias que tuvieron en otros momentos.
Gabriel Fernández: ¿Cómo estás viendo el panorama económico social en la República Argentina y estos primeros pasos que ha dado Sergio Massa junto a Gabriel Rubinstein?
Luis D’Elía: Está intentando ordenar la macroeconomía, serenar las relaciones del mercado. No es fácil dada la movida permanente que tenemos de los factores de poder. Se está moviendo con tacto, con inteligencia, con ductilidad, en momentos donde brilla en el escenario internacional la multilateralidad. Hay que resolver cuestiones con Estados Unidos y su área de influencia y a la vez firmar la Ruta de la Seda con China y tener buena relación con Rusia. Es un tiempo muy particular. Estas primeras semanas está intentando normalizar el clima general. Convengamos que la estampida económica la tuvimos a partir de la inestabilidad política. Hay que recordar a Perón por estas horas.
GF: Eso me parece importante de ser subrayado.
LD: Perón solía decir que la paz social traía estabilidad política y la estabilidad política traía estabilidad económica. Lo que está buscando Massa es eso y todos tenemos que darle una manito en esa dirección.
GF: ¿No se corre el riesgo de iniciar un proceso de retromarcha a través de un plan de ajuste? Digo porque otros planes de ajuste o de enfriamiento en la Argentina terminaron mal.
LD: Yo no llamaría ni ajuste ni enfriamiento. Hoy la macro anda en general bien, el nivel de actividad económica es bueno, el nivel de creación de empleo también, los índices de crecimiento del PBI mensual son más que auspiciosos. Hay que ir por la inflación, que es el gran tema. Me parece que está negociando cosas pesadas. Por ejemplo, si él logra obtener los nombres de las cuentas y los lugares donde están los 400 mil millones de dólares de argentinos en el exterior, me parece que es un buen objetivo que va a calmar muchas variables aguas adentro. La inflación y el tipo de cambio un poco dependen de esto.
GF: Se armó un buen debate a raíz de la presencia de dirigentes sindicales en la Embajada de los Estados Unidos. ¿Qué opinión te merece la acción de Hugo Yasky?
LD: Me enteré a la tarde que también fue Pablo Moyano, como en dos tandas distintas. En tiempos de la multilateralidad, está bien que nuestros dirigentes sindicales hablen con los factores de poder, como en este caso el embajador de los Estados Unidos. Lo que no quisiera es que, después de dar este paso, volvamos para atrás y terminemos haciendo trosko-kirchnerismo o arrinconando al Gobierno por cosas donde no hay demasiada variante. No es que Massa tiene diez cartas para elegir. Lo han hecho con mucha responsabilidad y a expensas de exponerse a una lluvia de críticas que suele hacer la gente que no tiene nada que perder. Me pareció bien que hablaran ahí.
GF: ¿Tenés cortados los vínculos con el kirchnerismo? ¿Hay una especie de pelea, de distancia plena?
LD: Yo soy el kirchnerismo. Lo digo con toda humildad. Yo planteé diferencias en algún momento porque creo que el kirchnerismo puede ser, dentro del marco democrático, un lugar revolucionario a la hora de debatir, de sustanciar diferencias, de fijar posiciones. No creo en las estructuras que consolidan el pensamiento único y donde no podemos discutir. Fui al homenaje en el ND Ateneo a los 100 años de Antonio Cafiero. Antonio era la renovación, el debate político, la sustanciación de diferencias, la convergencia de distintas posiciones ante la ortodoxia de la derecha peronista que no admitía ningún tipo de debate. Me gustó que haya ido buena parte del peronismo transversal al Ateneo. Una figura para tener en cuenta.
Tano Seminara: Pablo Moyano, cuando salió de la reunión, dijo que le asombró el embajador norteamericano y que es mucho más peronista que algunos de los nuestros. Muchos compañeros saltan mal en los grupos con respecto a este encuentro. El problema no está en reunirse. Algunos de los que estuvieron ahí criticaron a Alberto cuando se reunió con la UIA o a Massa que se va al FMI. El problema es si uno negocia algo. Hay que verse con todos.
LD: Se debatió hace como un año, cuando Alberto discutía con el Fondo junto con Guzmán. Lograron una reestructuración con un ahorro de más de 30 mil millones de dólares. En la vereda de enfrente estaba el default. A esta altura tenemos que sacar algunas conclusiones. A mis queridos hermanos venezolanos, a los que yo amo, cuatro años de default los destruyeron. Tenemos que aprender a no formular posiciones como si fueran un dogma. Lo digo pensando en lo que se discutía por entonces y en las conductas políticas que se desarrollaron. Este es un mundo en crisis que está saliendo de la pandemia, en una guerra tremenda, que tiene una crisis de hegemonía que no está resuelta. Son los tiempos de la multilateralidad y ojalá que sean de la búsqueda de la paz, de una humanidad que cuide el medio ambiente, que sea más democrática e igualitaria. Tenemos que repensar muchas cosas. Me parece saludable que lo mejor de la dirigencia sindical se haya juntado con el embajador de Estados Unidos, una señal de madurez.
Julio Carballo: Me gustaría saber tu opinión respecto al momento social actual de la economía, con un 7% de inflación, con un aumento de las tarifas y con una disminución del consumo, sobre todo en alimentos. Si esto no es un ajuste ¿para vos qué es?
LD: Si se podía hacer otra cosa, hagamosla. Yo nací hace 65 años en La Matanza, donde viví toda mi vida en los barrios más humildes. Veo que hoy tenemos 22 millones de argentinos protegidos, que entre la protección del Estado y la economía popular o informal tienen importante cantidad de ingresos, que nada tiene que ver con aquel 2001 cuando explotó la Argentina en mil pedazos, que teníamos 23% de desocupados, hoy solo tenemos 6,7% y no teníamos ningún plan social. El nivel de actividad económica es bueno, la inflación hay que pararla. El Gobierno ha hecho medidas compensatorias con la inflación: ha creado bonos, IFE. Está permanentemente tratando de empatar el partido. Lamentablemente, a veces, cuando uno mira las cosas que generan la inflación, los formadores de precios, los dueños de las cuevas financieras. Esos tipos que atacan los precios y la moneda son simpatizantes y/o militantes de Juntos por el Cambio, no son del Frente de Todos. Algunos pretenden hacernos creer que la responsabilidad es del Frente de Todos o de Alberto Fernández. Los muchachos están trabajando. Acá hubo una crisis política entre nosotros que generó una crisis económica. Veníamos con la inflación a la baja. Si esta crisis no se hubiese producido, estábamos en agosto en 3,5/4 puntos de inflación. Lamentablemente nosotros mismos nos pegamos un tiro en la pata. En honor a la unidad y los tiempos que nos toca vivir, hay que salir para adelante y el Gobierno está tratando de iniciar un camino.
De Alberto Fernández se dicen muchas cosas, pero nadie dice que está ejecutando 5.000 obras públicas en todo el país, en La Matanza en las zonas más pobres te atropellás con una obra pública en cada esquina, impresionante. Alberto tuvo que reestructurar la deuda brutal que dejó el macrismo, lo hizo de manera exitosa, ahorrándonos 30 mil millones de dólares. Consiguió 106 millones de vacunas, pagó los sueldos de todas las empresas privadas durante un año y medio, lo que no le tocó a ningún presidente argentino. Alberto Fernández no tiene una sola denuncia de corrupción. Alberto Fernández se jugó la ropa por Cristina en estos días terribles y le metieron tres pedidos de juicio político por su lealtad. Muchas veces tuve diferencias con Alberto, discutí de todas las maneras posibles pero la verdad hoy veo un Presidente que banca y veo en él a un compañero, sobre todo un compañero.
- Entrevista realizada en La Señal (lunes a viernes de 18 a 20 horas)
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