Por Carlos Aira (*)

¿30 EQUIPOS EN 2023?: La rosca ya está instalada. La idea viene desde el norte y veremos, con el transcurso de las semanas, cuanta fuerza reúne. ¿De qué trata el asunto? De un secreto a voces que genera urticaria en algunos ámbitos: un núcleo de clubes provinciales que desean un campeonato de 30 equipos para la temporada 2023 de Primera División.
La idea se generó en Tucumán y se extendió hacia Santiago del Estero, a pesar de la supuesta antinomia interprovincial. Este campeonato es un dolor de cabeza para varios clubes que están peleando, centésima a centésima, el status de Primera División. Atlético Tucumán y Central Córdoba están comprometidos en esta lucha. Como sucede en la mayoría de los clubes provinciales, la gobernación tiene una injerencia muy grande. Tan así, que la presidencia de estos clubes – como de otros clubes de la región – es una decisión política. Los gobiernos de Tucumán y Santiago comenzaron la operación. En AFA tienen un interlocutor de lujo. El santiagueño Pablo Toviggino es el hombre que tiene la lapicera en la calle Viamonte. Hombre de excelentes vínculos con los gobernadores y una cintura que le permitió ingresar al mundo del fútbol junto a la Comisión Normalizadora macrista y continuar en la calle Viamonte como titular del Consejo del Interior y Secretario Ejecutivo de AFA.
El fútbol argentino atraviesa un grave problema organizativo. Nadie quiere meter el bisturí y todo es coyuntura. La Primera División tiene 28 equipos y el Nacional suma 37. Las dos divisiones profesionales cobijan a 65 instituciones. Si sumamos B Metro, Primera C, Primera D y el Federal A, la suma total son 81 equipos (34 del Federal). A diferencia de otros campeonatos del mundo, con muchas categorías semi-amateurs, el fútbol argentino atomizó en los últimos años una cantidad inusitada de clubes en las dos categorías más profesionales. Las razones son económicas y hay que hacer historia. Fútbol para Todos fue más que una política del gobierno de CFK para confrontar con el Grupo Clarín. FPT puso dinero en bolsillos donde antes había pelusas. Muchos clubes acostumbrados a las penurias crecieron exponencialmente. Esto se puede comprobar con mucha facilidad: ¿Cuántos empleados – por fuera del fútbol profesional – tenían los clubes hace 13 años y cuantos ahora?
Bajar de categoría no solo significa un perjuicio económico. El mismo repercute en otros ingresos del club como son el ingreso de cuotas sociales y sponsors. El complejo entramado de relaciones y tensiones del poder de AFA imposibilitan los descensos masivos que pretenden los clubes poderosos. Pasemos en limpio. Un campeonato de Primera y Segunda División de 20 equipos por torneo dejarían a 27 equipos en otra categoría, por fuera de los grandes ingresos. Una decisión casi imposible de tomar por AFA. Aquí estaría la clave para comprender el proyecto.
¿Cómo sería el campeonato de 30? La temporada se dividiría en dos semestres. En el primer semestre se disputaría el primer torneo. Contaría con 30 equipos divididos en 2 zonas. Los primeros 10 de cada zona (20 equipos en total) jugarían en el segundo semestre el campeonato por el título de Campeón Argentino. Los 5 últimos de cada zona (10 equipos en total), disputarán en el segundo semestre, junto a 10 equipos del Nacional B, un torneo Reclasificatorio. Una posibilidad es que en ese torneo de 20 equipos, los 10 primeros se mantengan o ascenderían a Primera. Los últimos 10 descenderian o se quedarían en el Nacional.
¿Cual es el gancho de éste modelo? el vértigo con el cual se generarían ascensos y descensos. Desde las provincias entienden que éste modelo sería una solución para el problema de grandes clubes provinciales, con presupuestos enormes, que no pueden salir del pozo del Nacional B.
Los gobernadores compraron el modelo. El Nacional B es una amansadora imposible y la inversión provincial en clubes con pocas posibilidades de acceder al fútbol grande es importante. El proyecto cuenta con el rechazo explícito de los clubes más importantes. Por un lado aducen el problema de calendarios. Pero en realidad allí está la sempiterna tensión que genera el ascenso de muchos clubes, y en este caso, la desaparición de los promedios.
Otro problema que tendría que sortear este modelo es su emisión. Sería imperioso para AFA renegociar derechos de TV para repartir más dinero. A su vez, sumar partidos (20 partidos en el segundo semestre, contra las 14 que se transmiten hoy), sería necesario reordenar un fixture infernal o sumar pantallas de diversas plataformas.
A pesar de este rechazo, el proyecto camina dentro de un ala de poder del fútbol argentino. Quienes conocen los mentideros afirman que un gran mundial ayudaría a su concreción. El proyecto de 30 equipos tiene una espada importante dentro de la esfera gubernamental. Un hombre del norte sería el articulador en las altas esferas. Pero como hemos dicho en varias oportunidades: la política del fútbol no es la política nacional.

UNA DUPLA CURIOSA: ¡Bombazo en el fútbol! Central Córdoba sorprendió y contrató una dupla técnica debutante a pesar de la edad. A los 56 años, Abel Balbo realizará su primera experiencia como entrenador. Pero eso no es todo, su ayudante y coordinador de fútbol profesional es Julio Lamas, ex entrenador de la Generación Dorada del básquetbol argentino. La apuesta de los santiagueños es arriesgada. Con 18 fechas por delante, y sin mucho margen para el error, Balbo y Lamas pueden tener nombre propio, pero no tienen conocimiento del ambiente.
Lamas anunció en abril pasado su retiro del básquet. El fútbol es su nuevo desafío. ¿Lo aceptará el fútbol profesional? La actividad ha cambiado. La apertura es más amplia que en otros momentos. En los últimos años se aceptó sin muchas preguntas entrenadores sin experiencia en el fútbol profesional, como Jorge Sampaoli, Sebastián Beccaccece o Mariano Soso. Hoy es el turno de los out-siders. Entrenadores de otros deportes que arriban al fútbol con sus métodos y formas. El éxito de Ariel Holan alentó a Carlos Retegui. Años atrás, Julio Velasco, exitoso entrenador de Voley, fue seducido por Silvio Berlusconi para dirigir al Milan. Años más tarde fue Director Deportivo de Lazio.
Hoy, es el tiempo de Lamas. Junto a Abel Balbo tienen 18 finales por delante para mantener al ferroviario en Primera División.
COLEGIALES Y EL FASO: En la semana, el Club Colegiales presentó su nuevo sponsor. El mismo es Munrogrow, local que se presenta como tienda de cultivo.
Si bien el logo de la marca tiene una gran planta de marihuana, allí no se vende la misma. Si se pueden adquirir todos los productos necesarios para el crecimiento sano y fuerte de tu plantita de la risa. Sí, ¡Estamos hablando del faso!
El asunto puede ser gracioso o muy serio. Que la gente tome alcohol o fume tabaco puede no estar prohibido por ley si bien los productos son perjudiciales para la salud. En los últimos años, el deporte mundial combatió la publicidad de estas drogas institucionalizadas. La publicidad de tabaco está prohibida en el deporte. No así el alcohol. De hecho, la maltería Quilmes es uno de los sponsors principales del fútbol argentino.
El horno no está para risas en Argentina y los clubes tienen un rol social importante. En tiempos en los cuales los clubes contienen a los pibes del flagelo de las adicciones, un fútbol atravesado por el problema de las apuestas deportivas suma un nuevo actor que salió de la galera: un sponsor dedicado al cultivo de marihuana.
PARA EL FINAL: Los acontecimientos del viernes último en Independiente han sido tan ingratos como intensos. Bajo un clima violento, la Asamblea aprobó el presupuesto 2022/23 por mayoría. Los sucesos posteriores, de extrema violencia, pusieron al borde del abismo al oficialismo conducido por Hugo Moyano. En declaraciones radiales, el presidente del club puso el foco en el enrarecido clima político: “Ayer (por el viernes) hubo una banda que realizó destrozos que encabezan Doman, Ritondo, Arietto, Bullrich, Grindetti… que quieren ser dueños de Independiente e impulsaron la violencia de ayer. Quedó en evidencia, fue poco genuino”.
Genuino o armado, luego del viernes pasado, parece que no hay mucho hilo en el carretel del oficialismo. Hugo Moyano anunció que no apelará el fallo de la Cámara de Lomas y esta semana se pondrá fecha a las elecciones en Independiente. El rumor tiene mucho de información: el oficialismo no tiene candidato a presidente, vicepresidente y secretario general. Hugo Moyano, Yoyo Maldonado y Manuela Sánchez, la pata del oficialismo en la municipalidad de Avellaneda, no se presentarían a las próximas elecciones.
¿Se profundizará la ola amarilla en el club de Avellaneda? En esta semana puede haber un panorama mucho más claro.
Amigos, la seguimos la semana que viene…
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