Leonardo Bilanski, presidente de la Asociación de Empresarios Nacionales para el Desarrollo Argentino (ENAC), conversó en el aire de Radio Gráfica acerca de las medidas económicas que la gobernación de Buenos Aires está tomando para el sector de las Pymes.
En diálogo con el programa Abramos la Boca, Bilanski afirmó que “vemos como muy positiva la moratoria a diez años con un plan de pagos especial que impulsa la administración de Axel Kicillof con la Agencia de Recaudación de la Provincia de Buenos Aires (ARBA), y la línea de créditos de recuperación productiva que impulsa el Banco Provincia. También pedimos la suspensión de los embargos a Pymes, y la misma se extendió hasta el próximo 31 de marzo. A partir de esa herramienta pedimos el impulso de una moratoria a nivel nacional por parte de la AFIP con quita de intereses retransitorios y punitorios, un período de gracia y un tiempo de hasta sesenta cuotas para pagar deudas. Esto permite que los endeudados tengan margen de reordenar su situación fiscal, y ponerse a pensar en vender, comprar o fabricar, que es nuestra función“.
El entrevistado también evaluó que “el sector empresarial considera que la reactivación va a tardar alrededor de un año, no va a ser inmediata en virtud de lo que está pasando con el tema deuda externa, cuya negociación todavía no está avanzada. Solo para recuperar los destruido por Mauricio Macri y por Vidal, Alberto Fernández tiene que crear veinticinco empresas por día. En su esquema de prioridades, y nosotros lo acompañamos, la prioridad para los primeros seis meses de gobierno es dar herramientas para que las familias coman cuatro comidas diariamente. Cuando se resuelva la situación con el Fondo Monetario Internacional, sí hay que pensar un esquema más agresivo de inversión productiva. La tarea principal de las PyMES es ser una fábrica de salarios“.
Por últimos Bilanski indicó respecto al caso Vicentín que “demuestra que bajar las retenciones o sacarlas, darles crédito sin garantía a los amigos del poder, del campo, de los exportadores que nos iban a llevar al mundo, evidentemente, nos trajeron a esta situación. El camino es que las retenciones estén en función de la industrialización, que el crédito esté orientado al pequeño productor agropecuario. La concentración económica era la norma en el gobierno de Macri. Ahora, el sector agrario también es responsable. Me gustaría saber qué piensan de Vicentin la Sociedad Rural, CONINAGRO, CARBAP, CRA, ¿o se van a hacer los desentendidos? Cuando son ‘el campo’ van juntos a pelearle al Estado, pero cuando deben ¿van a ser solidarios? Acá se empieza a discutir el trasfondo de la política productiva del país y Vicentin es el ejmplo de lo que no hay que hacer nunca más“.
MG/GF/RG
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