La bomba estalló dentro del Comité Olímpico Argentino. El repudio generalizado por la apología al terrorismo de estado realizada por integranes del Comité Olímpico no puede pasar por alto. En Abrí la Cancha entrevistaron a Víctor Lupo, referente de REDeportes, quién exigió la apertura y democratización del Comité Olímpico Argentino.
La reivindicación del terrorismo de Estado realizado por el Teniente Coronel Diego Gusmán, Jefe de Misión del Comité Olímpico Argentino, avivó el debate dentro de las estructuras del deporte. Víctor Lupo, histórico dirigente deportivo exigió una apertura democratizadora dentro del COA.
En diálogo con Carlos Aira, Lupo se mostró dolorido pero no sorprendido por la situación: “Todos los miembros del COA tienen como consigna no mezclar la política con deporte, pero el 24 de marzo de 1976 no fue un acto político sino un golpe de estado. No se puede reivindicar a golpistas que eliminaron a 30.000 jóvenes de nuestro país”.
“Esto fue un escándalo que se hizo público porque dentro del grupo de Whattsup interno del COA se encontraba Marcelo Achille, representante de AFA en el COA. El no lo dejó pasar como tampoco lo hicieron Emiliano Ojeda, titular de la Federación de Deportes Universitarios; María Petrucci, de la Federación Argentina de Ajedrez; Laura Antas de la Federación de Cestoball y Laura Martínez, por la Confederación de Judo, quienes levantaron sus voces en contra de lo que estaban viendo. Pero no aparecen son quienes apoyaron a Diego Gusmán con algún comentario. Ellos piensan igual a él. Eliminaron el grupo de Whattsup pero no eliminan la estructura histórica del Comité Olímpico Argentino. Por más que salgan a defender la democracia, el COA es una institución prehistórico con pocos dirigentes a la altura de las circunstancias“, analizó el referente de REDeporte en Radio Gráfica.
Lupo analizó en Radio Gráfica cierto devenir histórico del COA y los golpes de estado: “Cuando saqué mi libro Historia Política del Deporte Argentino, hablé del Genocidio deportivo argentino. En esos días hubo un legislador que intentó presentar un juicio en mi contra por el término genocidio. Son los mismos que niegan que en 1955 hubo un genocidio deportivo con la suspensión de las grandes figuras del deporte. Esto es histórico: en cada golpe de estado toman el deporte en manos de ellos. En 1992 el COA mandó como jefe de Delegación al General Ernesto Alais y estalló el escándalo de la atleta Ana María Comaschi. Los escándalos siempre son patrimonio del Comité Olímpico Argentino; y no saquemos el tema de los doping, porque tienen la gran virtud de caer siempre bien parados y nunca tener nada que ver”
“El COA ha hecho creer a la dirigencia política argentina que ellos son intocables, pero el gobierno es quien les paga todo. El gobierno financia el ENARD, ¿Y el ENARD sacó un comunicado repudiando esto o no tiene nada que ver? El ENARD está compuesto por funcionarios del Estado y el COA y al Teniente Coronel Gusmán lo iba a enviar el ENARD a los Juegos Olímpicos de Tokyo“, subrayó Lupo en Abrí la Cancha.
Consultado sobre el silencio general sobre éste tema, el referente de REDeporte analizó: “Para la mayoría de los periodistas este tema es menor cuando en verdad es un asunto muy serio para la democracia argentina. Esto no termina con la renuncia de Gusmán: hay que comenzar a democratizar el Comité Olímpico Argentino dentro de las federaciones nacionales. Debemos tallar nuevos dirigentes y deportistas, porque los deportistas tampoco alzaron la voz. Mientras no formemos deportistas que sean capaces de enfrentar las injusticias estamos en un problema. Son pocos los deportistas con la grandeza de Diego Maradona que enfrentan el poder o los jugadores de fútbol que se pararon contra el coronavirus y no jugaron“.
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