Por Úrsula Asta*
Desde los estudios de Radio Gráfica, el ex juez de la Corte Suprema de Justicia y de la Corte Interamericana de Derechos Humanos reflexionó sobre la realidad política argentina. “Milei no llega por generación espontánea, sino por un vacío que genera la política tradicional”, dijo.
En una conversación que atravesó Historia, situación regional y política criminal, Raúl Zaffaroni se expresó de manera crítica. Lúcido a sus 84 años, fue optimista sobre una salida a la coyuntura. “Reconozcamos que hubo una decadencia de la política y eso requiere de una renovación de la política: aparecerá una nueva conducción”, planteó.
Tras abordar temas vinculados al Poder Judicial y las medidas que pretende el gobierno en materia de seguridad interior, la conversación atravesó fundamentalmente el momento político. Vacío de representación, la llegada de Milei al gobierno, el porvenir y los desafíos del campo popular.
En primer lugar, en torno a los anuncios realizados semanas atrás por la cartera de Seguridad, Zaffaroni sostuvo que la propuesta de que las Fuerzas Armadas participen en seguridad interna “es un gravísimo error” y que “es una lesión no solo a la seguridad sino a la defensa nacional”. “Yo creo que nuestros hombres y mujeres de las Fuerzas Armadas no están dispuestos a eso”, agregó.
Sobre el proyecto de ley de mafias, que el gobierno anunció de manera vinculada a la situación en Rosario y citando legislación comparada de Italia y El Salvador, el ex juez valoró que “la ley de mafias italianas ha dado un gran resultado: sigue la mafia”. “Cualquier proyecto descabellado de ley penal da un rato de televisión. Como si la ley penal resolviese porque las pongo en un tipo penal”, sumó.
LA POLICÍA SE CUIDA PAGÁNDOLE, TECNIFICÁNDOLA Y ESCUCHÁNDOLA
Consultado sobre la situación en Santa Fe, contestó que allí “se destruyeron las policías”. “Se les desarmó el aparato y cuando eso pasa, viene el caos. El problema es que cuando no se controla mínimamente a la policía, hacen cajas, se recauda al margen del estado y eso destruye a las policías. No es ya un estado fallido, sino un estado fracasado. Menos estado es lo que quiere cualquier colonialismo”.
“La policía se cuida pagándole. Un buen comisario debería tener el mismo salario que un juez, y de ahí para abajo. En segundo lugar, se cuida tecnificándola. Y en tercer lugar se cuida escuchándolas”, añadió en torno a una propuesta de sindicalización.
También evaluó que “hay una política que baja de Estados Unidos a América latina, que es la de policías únicas, todo América central lo tiene, también Perú, Chile, Ecuador. Y ahí sí es mucho más fácil generar el caos”.
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UNA CORTE DE CUATRO MIEMBROS SOLO EXISTE EN ARGENTINA
Tras plantear la situación extraordinaria del reducido número de integrantes del máximo tribunal de justicia de la Argentina, siguió en relación a la propuesta del Poder Ejecutivo para nombrar en la Corte Suprema a Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla: “No sé qué sentido tiene eso, porque se necesitan los dos tercios del Senado para tener acuerdo, y para eso se necesitaría una negociación”.
“Largan dos nombres que yo no sé si los va a quemar o por qué los larga sin negociación. No le veo futuro político. Esto hasta puede ser una cosa personal para quemar a otras personas”, planteó.
DE LAS CRISIS SALEN LOS GRANDES MOVIMIENTOS
“Milei no llega por generación espontánea, sino por un vacío que genera la política tradicional. En las crisis salen los grandes movimientos”, reflexionó sobre el panorama nacional.
“Nos encontramos en una crisis de vacío de la política, con métodos y candidatos que no funcionan, con reyertas y mezquindades, y una anomia de la gente porque no hay conducción. Sin embargo, nuestro pueblo ha demostrado tener un alto índice de racionalidad porque en esas condiciones se obtuvo un 45 por ciento, en otro país hubieran sacado 5”.
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ESTO TERMINARÁ PORQUE HABRÁ UN REPUDIO GENERAL
“No sé formalmente cómo va a terminar; pero esto va a terminar porque va a haber un repudio general en un momento dado”, auguró. “Cuando la invención de realidad llega a un límite, no pueden cambiar reglas de la historia. Vamos camino a una situación crítica, lo único que temo es que esa situación crítica sea violenta”.
Luego planteó: “Vamos a hablar de liberalismo en serio”. De esa manera, indicó que lo que sucede en la actualidad es una reducción del estado en política social, lo cual genera marginalidad que requiere control social, por lo cual, como contracara, “agrandan el aparato punitivo”.
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NO HAY QUE DEFENDER UNA INSTITUCIONALIZACIÓN FALLIDA
“Sin lugar a duda, tenemos una institucionalidad bastante deteriorada y ese deterioro se debe a la política”, criticó. Eso involucra, dijo, “el funcionamiento del estado, del Poder Judicial…, nos debemos una reforma constitucional hace años”.
“No hay que defender una institucionalización fallida, hay que arreglarla. Cuando veo una institución defectuosa y estoy en el poder político aprovecho sus defectos, cuidado: no estoy para siempre en el poder político”.
HAY UNA DECADENCIA DE LA POLÍTICA, APARECERÁ UNA NUEVA CONDUCCIÓN
“Reconozcamos que hubo una decadencia de la política y eso requiere de una renovación de la política”, enunció.
En línea, fue optimista respecto a que aparecerá una nueva conducción, como en nuestra historia “un día apareció Perón”. “Algo va a suceder y no hay que esperar 10 años. El vacío que produjo la política es muy intenso”.
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Respecto a la respuesta del campo popular al estado de las cosas, planteó que hasta ahora “los únicos que se han movido son los sindicalistas” y propuso que debe constituirse una suerte de “partido de los trabajadores”.

*Entrevista realizada junto a Leonardo Martín y Paulo Pereira en Feas, Sucias y Malas, sábados de 10 a 13 hs, por Radio Gráfica.
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