Por Nehuén Gusmerotti *
Más de dos años se hizo esperar el show que la noche de miércoles dio Lucy Patané en Niceto. Programado para los primeros trazos de la pandemia, ayer finalmente la artista del sur conurbanense se subió al escenario con banda completa y un recital cargado de energía contenida. Por casi dos horas deambuló entre el rock pesado que recuerda a sus inicios en hardcore, y las baladas folks desarrolladas con los años junto a Las Taradas. Una noche que nos devolvió la fe en que el rock muta, pero no muere.
La cita musical comenzó apenas pasadas las 21:00 con The Colorated. Desplegó una propuesta de trap pesado, muy oscuro y con tintes dubstep. Entre alguna balada y un cierre a puro punk rock mecanizado, la joven artista agitó las primeras cabezas en el boliche de Niceto Vega y Humboldt.
Para las 22:00 se volvieron a apagar las luces y atípicamente el plato principal arrancó con una invitada. Escondida tras un velo, Mel Muñiz salió a uno de los “balcones” de Niceto a hacer una hermosa versión de “La Noche de mi Amor”, un guiño a los años en Las Taradas que no sería el único de la noche. Luego de la hipnótica presentación de Muñiz la atención viró rápidamente al escenario principal cuando Lucy comenzó a interpretar las primeras notas de “Clavícula”. El telón dejó lugar a una puesta en escena visual y musical de primer nivel. Dos saxos, teclas, percusiones, batería, coros, guitarras, un sonido que bajaba demoledor. Lucy comenzó jugando con la música como quien lo hace con un juguete de toda la vida y en medio de la pesadez de su propio tema pincelaba tramos del clásico de Kaoma, “Lambada”. El público completamente entregado cantaba y saltaba apenas minutos de comenzado el show.
Con una versatilidad ya conocida, pero no por eso menos ponderada, Lucy fue alternando temas de su primer y único disco hasta el momento. Entre la acústica y la eléctrica fueron pasando “Ustedes”, “La Osa en la Laguna”, “Hoteles de Fuego”, “Aterrizaje” y “Búhos”. Luego de esta seguidilla propia llegó el momento de la segunda invitada, Flopa Lestani. Juntas nos regalaron una versión de “Harvest Moon” de Neil Young que erizaba la piel. “Un tema nuestro, que Neil Young compuso algunos años antes”, dijo Lucy. La guitarrista no solo manejaba la viola como una extensión de su cuerpo, también llevaba un ida y vuelta con la gente ameno y que mantuvo la calidez durante todo el recital.
Promediando el show llegó el momento de mostrar su último sencillo en vivo. Comenzó con la íntima y dulce “La del Avión”, canción que interpretó sola con su acústica sobre el escenario. La banda volvió para hacer “Tu Dialecto”, y luego llegó la otra cara del sencillo, “Nevada”. Pesado, plagado de arreglos y matices que muestra una vez más la carencia de techo de Patané. Ambos temas fueron lanzados en un vinilo de siete pulgadas y son rezagados de la producción del disco que afortunadamente se publicaron por su cuenta.
Si hablamos de invitadas, no podía faltar su compañera de ruta en Las Taradas. “En otra dimensión y en alguna vida pasada, seguro hicimos y estamos haciendo algo juntas”, expresó Lucy antes de darle la bienvenida a Paula Maffia. Paula le puso vos a una poderosa versión de “Ya no quedan” en lo que ya era el climax de la noche. Las ex compañeras de Las Taradas sumaron, además, “El Milagro Ruso” de La Cosa Mostra, otro de los proyectos que compartieron juntas en el pasado.
Ya en el ocaso de la velada “La Corte” dio lugar a uno de los hits, “En Toneles” y ese galopante ritmo que hizo explotar Niceto en un gran ida y vuelta con la gente. “Se va terminando el show” avisaba Patané, no sin antes repasar los destinos de las y los allegados. “¿Alguno del conurbano sur?” fue la precuela para el que cierra su disco, “Dock Sud”, un instrumental oscuro y complejo que desanda las calles del Docke tan solo con notas y coros. Para este tema el invitado fue Santiago Rua, de Poseidótica. Pero aún quedaba un poquito más de rock para quienes se habían apersonado en Niceto.
“Este es un regalo para ustedes”, dijo Lucy ya finalizando el show. Haciendo un guiño a la estética propuesta para la difusión del recital, comenzaron a sonar los primeros acordes de “Cuban Pete” de The Mask. La sorpresa fue cuando en pleno tema se sumó a la banda Lula Bertoldi para ponerle voz a la icónica versión cinematográfica. La guitarrista y cantante de Eruca Sativa se quedó en el escenario un poco más para desandar algunos recuerdos noventosos para ponerle el broche de oro a una noche que mostró lo mejor de la escena nacional actual.
Del rock a la balada, del folk al punk, Lucy Patané desplegó en Niceto una tremenda puesta en escena. Cuidada pero potente, con una banda tremenda que aporta matices y magia a cada canción. Hablar del presente de la artista argentina no descubre nada, pero nunca está de más destacar a las grandes referencias de nuestro rock. La musicalidad de Lucy Patané le da un techo inimaginable que ya hoy es presente de jerarquía. Lo de Niceto es otra noche que, quienes tuvimos la suerte de estar, nos vamos a guardar para todos los tiempos.
(*) Conductor de Resistiendo con Ideas (viernes y domingos de 22 a 00 horas)
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