Por Leonardo Martín y Lucas Molinari
El Sindicato Único de Trabajadores del Neumático (SUTNA) realizó un paro de actividades este jueves que culminó con una movilización a las puertas del Ministerio de Trabajo. El motivo es la falta de acuerdo en la negociación paritaria en un conflicto que ya tuvo siete medidas de fuerza por parte del gremio y ocho audiencias con el sector patronal desde el comienzo de la negociación.
“Cada pronunciamiento de las patronales, cada audiencia, constituye una manifiesta contradicción, ratificando por un lado estar abiertos al diálogo y simultáneamente actuar con total intransigencia repitiendo la misma mezquina propuesta una y otra vez”, expresaron desde el SUTNA tras la audiencia realizada el pasado miércoles 15 de junio que desembocó en el paro y en la movilización.
La demanda salarial del gremio es una recomposición salarial por encima de la inflación y que las horas trabajadas los fines de semana se paguen al 200%, principal aspecto que al menos en la superficie traba la negociación. El sector patronal está compuesto por las tres empresas fabricantes de cubiertas en el país que son Pirelli, Bridgeston y FATE, todas con plantas en el Conurbano bonaerense.
“Este pedido moderado tiene como respuesta una obstinación absurda y desproporcionada por parte de las patronales”, afirmaron desde el SUTNA advirtiendo que la razón para no cerrar la negociación “no es por un factor económico” ligado a la paritaria, “sino la búsqueda de otros intereses”.
Asimismo desde el SUTNA ya adelantaron que habrá una nueva medida de fuerza por 16 horas (dos turnos) para el próximo martes 21 de junio que alcanzará a las tres empresas. En la misma semana, el viernes 24 de junio, se realizará la nueva audiencia entre el gremio y las empresas.
Consultado por Radio Gráfica, el secretario general del SUTNA, Alejandro Crespo, expresó: “no hay razón para continuar con este conflicto, las empresas tiene que dar respuesta a un reclamo que solo representa el 15% del costo salarial”. También criticó a las empresas por “caer en un vacío al argumentar” en las diferentes audiencias.
QUÉ OTRAS RAZONES IMPULSAN AL CONFLICTO
El actividad automotriz es uno de los sectores de la industria que ha registrado mayor crecimiento durante el gobierno del Frente de Todos. Problemas de ventas no tiene, con precios de cubiertas que se han disparado en el último período y que incluso el ex secretario de comercio, Roberto Feletti, previo a su renuncia había convocado a las empresas para que justifiquen la disparada en los precios por encima de los costos.
La reticencia al acuerdo por parte de las patronales pareciera no tener que ver con el aspecto salarial en sí, sino con el juego cruzado con el Gobierno nacional, con un par de sus ministerios, y el Banco Central. El empantanamiento deliberado de las paritarias como parte de otra negociación.
Las empresas del sector quieren mayor disponibilidad para sacar los réditos generados en el país para girar a las casas matrices y en la formación de activos externos y, paralelamente, contar con dólares para importar con mayor libertad insumos. Esto en un contexto de restricciones por la insuficiente cantidad de dólares del Banco Central para sostener un proceso de crecimiento y por los rumores de que se van a establecer mayores controles en la salida de divisas. Todo indica que el juego por parte de las empresas tiene como interlocutores a los ministerios de Trabajo, Desarrollo Productivo y al propio Banco Central.
En esa línea también está planteada la idea que las diferentes medidas de fuerza van a generar desabastecimiento en las terminales automotrices locales, situación que fuentes gremiales niegan que sea así: “es imposible que los paros realizados hasta ahora generen desabastecimiento”.
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