Argentino “Tito” Geneiro, secretario de Formación y Capacitación Profesional de la Confederación General del Trabajo y encargado del mismo área en la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (UTHGRA), visitó el Estudio Patrick Rice de Radio Gráfica y mantuvo una extensa con charla con Mauro Cavallin, Maringa Álvarez y Ramiro Coelho.
Mauro Cavallin: Bienvenido, buenas tardes.
Argentino Geneiro: Muy contento de estar acá con ustedes, compartiendo este programa que me llena de alegría. Uno ha estado un poco guardado pero ya estamos en plena actividad.
MC: Una actividad intensa para los trabajadores y los dirigentes sindicales.
AG: Sí, en nuestra actividad tuvimos un golpe muy fuerte con la pandemia. La hotelería, la gastronomía y el turismo fueron de las actividades más castigadas y nos está costando salir, pero somos optimistas. Yo digo siempre que, por idiosincrasia, la gente nuestra para salir a conversar de cualquier cosa va a tomar un café al boliche de la esquina. Nuestros afiliados están en los restaurantes, las confiterías, los bares, los hoteles, los comedores de fábrica, que empezaron a moverse y nuestra actividad está empezando a moverse de nuevo. Habíamos perdido más de 100.000 trabajadores y ya recuperamos casi 40.000, nos da esperanzas de que las cosas van a mejorar absolutamente en un tiempo prudencial. Las zonas turísticas han trabajado muchísimo en este último tiempo, han estado llenas de gente y esto nos da la tranquilidad de que hay gente que está recuperando su puesto de trabajo.
MC: A veces se critican los fines de semana largos, la política del Previaje, pero para su sector son fundamentales.
AG: La política del Previaje ha sido fantástica para darle posibilidad a mucha gente que no tenía chance de viajar. El tema del turismo en la Argentina es la industria sin chimenea que no está valorizada como corresponde. Hay países que viven del turismo, como por ejemplo España, que recibe más de 80.000.000 de turistas al año. Es una actividad económica tremenda, genera puestos de trabajo, apertura de establecimientos y le da vida. Nosotros, que tenemos una geografía inmensa y superior a la de España porque tenemos todo para mostrar, no llegamos ni a 10.000.000. Es preocupante pero para eso estamos trabajando. Nuestro sindicato, en particular, en la parte que le toca, que es la educación para el trabajo.
Ramiro Coelho: ¿Cómo evaluás el crecimiento de la actividad turística de los últimos 20 años?
AG: Hay un crecimiento pero es muy lento y escaso, teniendo en cuenta el potencial que podemos ofrecer. No hay campañas en serio o importantes, o se cortan. Hay algunos emprendimientos de salir a mostrar las bondades de la Argentina pero se cortan, no hay una continuidad. No hay una política integral en lo que significa el turismo. El turismo no es solamente la propaganda en Europa o Estados Unidos de mostrar la Argentina, también es la educación para el trabajo y el compromiso del sector empresario. A veces los empresarios se quieren salvar en tres meses y hacer la plata de un año, que es lo que pasa en las zonas turísticas. Y eso lo paga el cliente. No es justo que una persona que va a vacacionar pague una barbaridad por un servicio. Tenemos que ser cuidadosos porque la hotelería, la gastronomía y el turismo es buena atención, buenos precios y buena mercadería.
MC: Tu sindicato representa al mozo, al que trabaja en la cocina, al que te atiende en el mostrador del hotel.
AG: Tenemos mozos, camareras, mucamas, gobernantas, recepcionistas, conserjes, peones. Todo lo que representa el trabajo dentro de un establecimiento en comedores de fábricas, escuelas, clubes, restaurantes, confiterías, bares, hoteles, moteles, hoteles alojamiento. Tenemos más o menos 500.000 trabajadores, de los cuales muchísimos miles están en la informalidad. Nuestros empresarios evaden, tiene mucha gente en la informalidad. Ustedes lo vivirán por experiencia propia. Van a un establecimiento gastronómico a comer y el 90% les da un papelito que dice “no válido como factura”. Te cobran y no le pagan al Estado. ¿Qué pasaría si todo el mundo pagara el IVA? La cosa está mal para todos los que tenemos sueldos fijos y no podemos actualizar nuestros salarios. La inflación te come tu salario pero no conozco a ningún empresario gastronómico que no actualice sus precios. Ellos actualizan, nosotros no.
MC: Quiero preguntarle por su especialidad, que es un capítulo muy importante para charlar, que tiene que ver con la capacitación y la formación del trabajador. Usted se encarga de esto en su sindicato hace muchos años, también dentro de la CGT y hace algunos días han inaugurado el nuevo Instituto de Capacitación y Formación Profesional, en Tucuman 651, en la Ciudad de Buenos Aires.
AG: En este edificio que tiene 12 plantas funciona el Centro de Formación Profesional nº12 Eva Perón, que cobija a más de 1.200 alumnos con todos los roles de la actividad más los programas que establece el sindicato como aporte al programa oficial que son: ceremonial, protocolo, oratoria, atención al cliente, inglés técnico, computación, manipulación de alimentos, concientización turística. Son cursos gratuitos que le damos, como valor agregado, al programa oficial establecido por el Gobierno de la Ciudad. Todo para que tengamos profesionales mucho más preparados y puedan acceder a los puestos de trabajo de nuestra actividad con el salario que corresponde. Normalmente, los cocineros cobran por encima del convenio. Además del Centro de Formación Profesional, tenemos el Instituto nº 34 de Nivel Terciario donde ahora estamos dando tecnicaturas en turismo. A partir de agosto, arrancamos con la tecnicatura en gastronomía. No solamente va a estar apto para cocinar, sino también para manejar una cocina en todos los sentidos. Un analista gastronómico. Algo que estoy soñando, que estamos pergeñando, es la futura universidad gastronómica. Para que nuestros alumnos pasen de la formación profesional a la tecnicatura y luego a la licenciatura.
No es solamente la capacitación para el trabajo, sino también la capacitación de nuevos dirigentes, que no tienen que estar limitados a la discusión del salario o del convenio colectivo. Los dirigentes de este tiempo tienen que saber de economía, del mundo, de administración, de los distintos niveles de conducción que tienen los trabajadores: los delegados, los dirigentes intermedios.
Maringa Álvarez: La capacitación es fundamental también para crecer en el puesto y tener un ingreso mayor.
AG: Yo digo que nunca hay que ser un esclavo, pero sí tener consciencia de lo que significa la atención al cliente. El cliente es el que deposita un dinero y hay que atenderlo como corresponde. Si no sabe tu idioma, tenés que tratar de entenderlo. Nosotros damos inglés, portugués, en todas nuestras 56 escuelas de formación profesional.
Quizá nosotros no seamos buenos vendedores de lo que hacemos. Los sindicatos no hacen marketing de lo que generan todos los santos días con la gente, porque están al pie del cañón. Atendemos no solamente la problemática de la educación para el trabajo, sino que también atendemos la salud, el turismo social, los problemas diarios. Para eso estamos todos los días. Hay algunos aplausos cada tanto pero cachetazos todos los días. Nos está faltando buena comunicación, no se invierte en la buena comunicación que permite que la gente vaya formando su opinión, más allá del trabajo del trabajo sindical que se hace. Nuestros trabajadores reconocen y vuelven a elegir porque hacemos.
MC: Cuando le tocaba viajar, por sus responsabilidades de la OIT, se encontraba con representantes gremiales de otros países de Latinoamérica que veían una referencia en el modelo sindical argentino por la importancia y la magnitud en afiliados y gestión. ¿Cómo nos explica esta diferencia de desarrollo?
AG: El 99% son sindicatos por empresa. El secretario general de la súper confederación de trabajadores de la banana Urabá, Colombia, era un cuadro impresionante por sus conocimientos, pero tenía representaba a 200 tipos. La mayoría de las peleas las perdés, porque los empresarios tienen el poderío económico y de llegar al poder político. Hoy un sindicalista argentino, con una representación de 300.000 tipos en la espalda, se sienta en cualquier mesa de discusión y lo tienen que escuchar. La clave está en la ley. Ellos no tienen una Ley de Asociaciones Profesionales, ellos no tuvieron a Perón. Yo les decía: “en lugar de que salga todos los días un dirigente sindical en los diarios diciendo que es el más combativo del mundo pero los trabajadores quedan todos en la calle ¿por qué no apuestan a lograr un modelo parecido al sindical argentino que está basado en leyes?”. Como la Ley 23.551, que permite un sindicato que funcione por rama de actividad y no por empresa. Ahí está el quid de la cuestión. Se los decía para que peleen por esa posibilidad, en unidad. Es complicada la cosa.
MC: Ustedes tienen formación para sus dirigentes.
AG: Tenemos formación para nuestros delegados, con especialistas que explican el manejo del estatuto, las leyes de nuestra actividad. Tienen que saber cómo defender a sus compañeros.
MC: ¿Cómo analiza la actualidad de la CGT desde la formación? Y el rumbo que tiene la central de los trabajadores argentinos.
AG: Uno de los temas claves es fortalecer la unidad del movimiento obrero. Este modelo no fue fruto de la casualidad, sino que nació a partir de que el General Juan Domingo Perón convocó a los dirigentes sindicales en el año 1943, desde el Departamento Nacional de Trabajo, para decirles cómo tenía que ser el movimiento obrero argentino. Estableció un modelo sindical y le dio un espacio de participación a los trabajadores organizados. Perón le dio un espacio de participación en el poder real a los trabajadores, que es lo que tenemos que recuperar. En 1983, en las cámaras legislativas, donde se definen las políticas y se votan las leyes que rigen la vida de los trabajadores y la comunidad en general, teníamos un espacio muy importante de participación, con más de 30 diputados nacionales. Eso dijo Perón. Con el tiempo, lo fuimos dejando de lado. Una de las premisas para recuperar los espacios del peronismo es que el movimiento obrero retome ese espacio de poder que le corresponde. El genio de la política dijo que la columna vertebral del movimiento nacional eran los trabajadores y nadie mejor para defender sus intereses que los representantes de los trabajadores en las cámaras legislativas nacionales, provinciales, municipales.
MC: ¿Ve clave la unidad dentro de la política nacional?
AG: Por supuesto. Vengo desde muy joven, desde los 16 militando en el peronismo y la verdad que siempre nos costó la unidad. Pero siempre hubo liderazgos fuertes y los fuimos perdiendo. Después se equivocó el rumbo, tenemos que ser capaces de hacer autocrítica. ¿Qué es lo que distinguió al peronismo en el poder? El compromiso con la educación, la producción, el trabajo, la vivienda digna, con la salud. Para mí no es ningún éxito festejar tener cada día más planes sociales, eso es el fracaso de una política, es un parche. Hay que atender las necesidad del hombre que no tiene nada pero yo prefiero darle educación y trabajo. Esa tiene que ser la meta de cualquier gobierno y sobre todo de un gobierno peronista.
MC: ¿Por qué el peronismo está en la genética de un dirigente sindical? ¿Qué es lo que te engancha?
AG: Te digo lo que me enganchó a mí. Mi papá era de la Unión Cívica Radical Intransigente. Yo no sabía nada, tenía 10 años. Tenía una familia peronista al lado de mi casa y veía que ellos eran muy felices y nosotros éramos… pobrecitos. A los 14 años decidí irme de mi casa y venir acá a Buenos Aires. Me quedó grabado esto de ¿por qué nosotros no éramos peronistas y los vecinos sí? Empecé a leer mucho de peronismo, todos los libros que escribió Perón. Después que leí todo eso, yo dije: “no puedo ser otra cosa que ser peronista”. Esta obra majestuosa del peronismo que terminó con la esclavitud en la Argentina, que muchos no recuerdan. Tenemos que tener identidad de clase y fortalecer lo que somos. Lo que me enamoró del peronismo es el sentido de lo que significa la justicia social, que no tiene nada que ver con la ayuda social. La justicia social es el derecho que tenemos los seres humanos de ser felices a partir del trabajo y el compromiso de nuestros dirigentes que tratan de acompañarnos y ayudarnos como corresponde.
- Entrevista realizada en Abramos la Boca (lunes a viernes de 16 a 18)
Discusión acerca de esta noticia