Por Valeria Rodríguez*
El martes 23 de marzo se llevaron a cabo elecciones generales en Israel. Son las cuartas elecciones en menos de dos años y las numero 24 en la historia del país. La característica importante es que se convocaron tras una enorme crisis política que llevó a la disolución del gobierno en dos ocasiones.
En marzo del año pasado se había convocado a elecciones generales después de la imposibilidad de conformar gobierno. 76 días después de realizadas, se pudo conseguir conformar un gobierno de coalición entre el partido Likud (Netanyahu) y el partido Azul y Blanco (Benny Gantz) pero no fue fácil lograr el consenso entre ellos y mucho menos mantenerlo.
De hecho, uno de los temas centrales que usó Netanyahu como estrategia para la construcción de consenso fue la anexión de Cisjordania, lo cual no pudo cumplirse en agosto del 2020.
Se llegó al máximo de las diferencias entre ambas facciones con la normalización de relaciones con Emiratos Árabes Unidos a quienes aprobaron la compra del F 35, lo cual generó un gran enojo de Benny Grantz hacia Netanyahu.
El 21 de diciembre del 2020 el gobierno presentó un proyecto de ley para evitar la disolución del parlamento pero este no fue aprobado y se adelantaron las elecciones para el 23 de marzo de 2021.
El sistema político
Cabe destacar que Israel cuenta con un sistema parlamentario unicameral con división de poderes y cuya característica es que cuenta con un presidente, el cual es protocolar, y un primer ministro, siendo este último el que tiene más presencia política.
Para formar gobierno es necesario entablar acuerdos con las diferentes facciones. Es decir, que el partido ganador debe construir consensos.
El Congreso se llama Kneset y es unicameral. Cuenta con 120 escaños y cumple la función del Poder Legislativo. Las elecciones parlamentarias se celebran cada cuatro años, pero la Kneset puede disolver el gobierno en cualquier momento por una cuestión de confianza.
De hecho, el año pasado se llevaron a cabo elecciones en marzo porque se venció en diciembre el plazo para conformar gobierno y se tardó 76 días en lograr los consensos pertinentes para conformar uno nuevo, lo cual volvió a repetirse con estas elecciones.
Según el Comité Electoral israelí, en esta ocasión hubo una disminución del 10 por ciento en la presencia electoral de los partidos que en estas elecciones fueron 36 mientras que en las elecciones del 2020 fueron 41.
¿Netanyahu ganador?
Si bien los resultados finales se esperan para el viernes, con casi el 90 por ciento de los votos escrutados hasta el momento, el primer ministro Benjamin Netanyahu cuenta con 52 escaños de 120, después de que la Lista Árabe Unificada lograra obtener 5 escaños.
Todavía no está todo dicho ya que Netanyahu podría alcanzar los 59 escaños si el partido Yamena, de 7 escaños, se une a él.
Netanyahu intenta atraer a Naftali Bennett y está tratando de empujarlo a la coalición de derecha. Bennett, que anteriormente dirigió el Partido del Hogar Judío junto con Aylett Shaked, formaba parte de la coalición de derecha y fue ministro de guerra del gabinete de Netanyahu antes de que se formara el gabinete en abril de 2020, pero desacuerdos en relación con el presupuesto y otras cuestiones internas lo llevaron a fundar el Partido Yamina.
Por su parte, la Lista Árabe Unificada, encabezada por el diputado Mansour Abbas, pudo superar el umbral de 5 escaños. Este último, en diálogo con el canal 13 de Israel, sostuvo que la lista está dispuesta a cooperar y negociar con cada parte, incluido el Likud liderado por Netanyahu.
Los resultados anunciados hasta ahora muestran que Likud tiene 30 escaños, mientras que el partido Hardi-Ha’areed Shas tiene nueve escaños. El Partido Ashkenazi de Digel Hetorah tiene siete escaños. Hay que señalar que estos partidos conforman la facción pro-Netanyahu.
Todavía no está todo dicho pero hay probabilidades de que Netanyahu consiga los 59 escaños necesarios para coaligarse con los afines a su partido (el ala derecha) y 61 para lograr mayoría, lo que le permite conformar coalición.
La respuesta de Hamas a las elecciones israelíes
El movimiento de resistencia palestina Hamas emitió un comunicado en el cual da cuenta de la crisis política en la cual está inmersa Israel y, además, aclara que no existen diferencias entre las distintas facciones israelíes:
“Celebrar la cuarta elección del régimen sionista en menos de dos años representa la crisis política de este régimen y la profundidad de las divisiones internas de la comunidad sionista, lo que demuestra que esta sociedad es débil y que la determinación del pueblo palestino es plenamente capaz de derrotarla.
Nuestra batalla contra el enemigo sionista se establecio desde el pasado, y cualquier cambio, victoria y derrota de las partes israelíes no cambiará la naturaleza de esta batalla, la resistencia palestina continuará su camino y el pueblo palestino seguirá apoyando la resistencia”.
El próximo 22 de mayo se llevarán a cabo las elecciones del Consejo Nacional Palestino. Las últimas elecciones habían sido en 2006, y el hecho de que se convoque a votar da cuenta de un intento por parte de las diferentes fuerzas palestinas de buscar unidad a pesar de tener diferencias en relación a la lucha palestina, la cuestión de la ocupación, los refugiados y el gobierno palestino así como la posible “solución” del o los dos Estados.
Se espera que la participación electoral de las elecciones palestinas sea multitudinaria. Mientras tanto, la participación en las elecciones israelíes fue del 67,2 por ciento, a diferencia de las elecciones de marzo del 2020 que fue del 70 por ciento.
(*) Política internacional en Feas, Sucias y Malas (sábados de 9 a 12 por Radio Gráfica)
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