Radio Gráfica
  • Secciones
    • Política
    • Gremiales
    • Sociedad
    • Mundo
    • Deportes
    • Cultura
    • Opinión
  • Grilla
  • ¿Quiénes Somos?
    • Historia
    • Contrataciones
    • Comunidad RG
    • Contacto
No hay resultados
Ver todos los resultados
  • Secciones
    • Política
    • Gremiales
    • Sociedad
    • Mundo
    • Deportes
    • Cultura
    • Opinión
  • Grilla
  • ¿Quiénes Somos?
    • Historia
    • Contrataciones
    • Comunidad RG
    • Contacto
No hay resultados
Ver todos los resultados
Radio Gráfica
No hay resultados
Ver todos los resultados
Home Opinión

Inventamos o erramos

Apuntes para la militancia

15 noviembre, 2020
en Gremiales, Opinión
0
Inventamos o erramos

Ilustración de Rocambole para el álbum "La Mosca y la Sopa" de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota.

Por Agustín “Piraña” Colovos *

Estas humildes opiniones que vas a leer ahora, no me pertenecen del todo, sino que son fruto del debate colectivo que venimos dando con un conjunto de compañeros y compañeras de distintos ámbitos (barrial, sindical, familiar, etc) semanalmente, en estos tiempos de pandemia. Retoman los grandes ejes e interrogantes y obviamente también la experiencia, que tiene un movimiento nacional de liberación tan grande como es el peronismo.

Pues el campo donde nos movemos es el mismísimo pueblo, es decir, la realidad misma, que se nos presenta tal y como es, y no como desearíamos que sea. Es en el pueblo donde se encuentran todos los matices, los blancos, los grises y los negros, las contradicciones y también la firmeza. Desde ahí es donde nos nutrimos para sacar conclusiones histórico-políticas que nos permitan realizar la autocrítica (sin autoflagelarse) y así poder avanzar en un camino de mayor justicia social, independencia económica y soberanía política.

Solo con un pueblo con voz y voto, y organizado, es que se podrá avanzar en este sentido. Michel Foucault decía que no hay nada mas indigno que hablar por los otros. Y nuestro pueblo ya tiene la garganta seca de tanto gritar y muchas veces no ser escuchado. Como también decía el General Perón parafraseando nuestro poema nacional: “quien quiera oír que oiga…”

Ya cumplimos un año de gobierno del Frente de Todos. En el balance obviamente nadie puede ser tan obtuso de no tener en cuenta los cuatro años de destrucción macrista (maravilloso que pudimos sacarlo en cuatro años), más la pandemia mundial del covid 19 que fulminó la economía capitalista mundial.

Ahora bien, partiendo de esa base, y todos vemos a nuestro gobierno con una orientación popular, con buenas intenciones, pero con dificultades para resolver los problemas que está padeciendo la inmensa mayoría de nuestro pueblo.

Por eso en este articulo me propongo señalar una serie de puntos para contribuir al debate que actualmente se está dando en la militancia de base, pero también en la dirigencia del movimiento obrero.

AEA-FMI

“El bronceador charlotte, te cuida de la radiación,
rematan el electro, de Elvis a morir,
Fijate de que lado de la mecha te encontras,
con tanto humo el bello fiero fuego no se ve”
Patricio Rey y sus redonditos de ricota, Queso Ruso, La Mosca y la Sopa (1991).

Leemos semanalmente que el gobierno constantemente se reúne con la AEA, con las misiones del FMI, con el grupo del complejo Agroindustrial, con los banqueros, etc. Es decir, con el enemigo histórico. ¿Esto está mal per se? Claramente no, pues un gobierno nacional debe escuchar y recibir a todos los sectores de la vida nacional. El problema radica en lo siguiente: ¿Con qué visión estratégica se discute con estos sectores del poder económicamente concentrado?

Karl Von Clausewitz decía que la guerra es la continuación de la política por otros medios, y hace rato que en el mundo estos sectores concentrados nos declararon la guerra a los pueblos. Le podemos agregar a este concepto a Vladimir Lenin, que afirmaba que la política es economía concentrada, es decir que detrás de cada medida o acción política hay intereses económicos. Esto los trabajadores lo entendemos a la perfección. Por lo tanto, lo primero que debería hacer un gobierno que intenta llevar adelante los intereses de la mayoría, es definir quien es el enemigo y quienes los aliados en base al programa que quiera llevar adelante. Esto aun no se ve muy claro de parte del Frente de Todos.

Creer que esos sectores del establishment (AEA-FMI, etc) tienen intereses en desarrollar un proyecto nacional, con mercado interno fuerte, pleno empleo, salarios altos, industria fuerte, con ciencia y tecnología aplicada, es como creer en los reyes magos.

Sus intereses, están en la exportación, por lo tanto, necesitan constantemente devaluar la moneda, para licuar sus costos en pesos, y (acordémonos lo que dijo Mauricio Macri en TN, que el salario es un costo más), necesitan ajuste y reforma laboral como pide el FMI. No son nacionales, por el contrario, son anti-nacionales. Su reproducción material, está atada a un proyecto de país antagónico al nuestro. Es decir, en el proyecto de AEA y el FMI no tenemos cabida las mayorías nacionales.

Hay un dicho popular, que es muy simple y verídico, que dice: “no es culpa del chancho sino del que le da de comer”. Y desde la marcha atrás de la expropiación de Vicentin, que era una medida importantísima y estratégica, que el pueblo festejó, no paramos de darle de comer a los cerdos.

Para terminar este apartado me gustaría citar textual a mi amigo Charly Avondoglio, en un articulo, escrito unos meses antes de que asuma el gobierno del Frente de Todos, pero que tiene absoluta vigencia: “La divisa con la que los Fernández desembarcarán en el ejecutivo, si reeditan el desempeño de agosto, será el pacto social, o como lo bautizara Cristina hace algunos meses: un nuevo contrato social de ciudadanía responsable. Esto es, un acuerdo tripartito entre el capital, el trabajo ( en sus diversas formas) y el Estado que genere las condiciones para el crecimiento de la economía y la superación de la crisis imperante. Desde luego, el logro de los consensos supondrá la ponderación de ciertos interese y la postergación de agendas que muchos actores involucrados consideran urgentes. Tanto el Congreso de la Productividad de 1955 como el Pacto Social de 1973 testimonian las dificultades con que, en el orden práctico, se topan este tipo de concertaciones. En el fondo, interpelan una noción hondamente arraigada en el imaginario peronista, y en torno de la cual se interrogaba, en 1991, Germán Abdala: ¨Sostuvimos ante la necesidad del Pacto Social, la creación de la comunidad organizada. Pero, ahora, ¿con quién el Pacto Social? ¿con Perez Companc? ¿con Macri, acaso? La lucha de clases es la letra chica del frente nacional´”.

 

Peronismo o desarrollismo

“Yo no soy de aconsejar, pero estás jodiendo al personal”
Patricio Rey y sus redonditos de ricota, Blues de la Artillería, La Mosca y la Sopa (1991)

Retomo lo escrito por Lucas Molinari y Leo Martín en el Panorama sindical del domingo 8 de noviembre de 2020: “La pregunta es entonces, ¿Cómo pensar un país para 45 millones? ¿Es posible bajo el dominio de las clases dominantes argentinas?” Desglosemos.

La estructura económica de nuestro país, viene concentrándose y centralizándose cada vez más desde 1976. Hoy menos de 500 empresas transnacionales manejan el 80% de la producción de bienes y servicios que consumimos los argentinos. Es decir son los formadores de precios; ahí hay que buscar las causas de la inflación, en estos verdaderos monopolios, no en el verdulero del barrio. Los servicios públicos están en su gran mayoría en manos de empresas privatizadas, así como la energía. Los bancos son casi el 90% extranjeros y la propiedad de la tierra está en manos de la oligarquía terrateniente, solo pensando en la exportación de commoditties. con este modelo de “campo” hoy la Argentina tiene concentrada su población en un 92% en zonas urbanas.

El desarrollismo cree que a más inversión de las empresas transnacionales, va a haber más crecimiento económico y por ende, más trabajo y producción. Esto es una teoría perversa del derrame encubierta. Las inversiones de estos grupos concentrados, no son pensando en el país, sino en maximizar su tase de ganancia y así poder seguir concentrándose.

Estamos retrocediendo con el desarrollismo que es hegemónico en un sector importante del Frente de Todos. La falacia de esta teoría, ya fue estudiada por los grandes del pensamiento nacional, como Scalabrini Ortiz, Jauretche, Hernandez Arregui y demás patriotas y ejecutada a la inversa en los gobiernos del General Perón. Corramos como siempre decimos, un poco más el horizonte de lo posible. O desarrollismo o economía nacional.


Álvaro García Linera y Cristina Fernández de Kirchner

“El lujo es vulgaridad dijo y me conquistó, de esa miel no comen las hormigas”
Patricio Rey y sus redonditos de ricota, Un poco de amor francés, La Mosca y la Sopa (1991)

Casi en simultaneo se publicaron una carta de la vicepresidenta Cristina, en conmemoración del décimo aniversario del fallecimiento de Néstor Kirchner, y un reportaje hecho por la Revista Crisis al ex vicepresidente del Estado Plurinacional de Bolivia Álvaro Garcia Linera luego del triunfo aplastante del MAS en las ultimas elecciones del país hermano. Recomiendo la lectura atenta de los dos textos.

Vamos primero con Linera: “Hoy por hoy en Bolivia no ha surgido de las fuerzas opositoras, de las fuerzas conservadoras, un proyecto alternativo, de economía, estado y sociedad. Y ese es su límite. Las fuerzas conservadoras lo que hacen es simplemente agarrar lo viejo y endurecerlo. Le añaden un poco más de autoritarismo, un poco más de racismo, una dosis de odio, una de rencor, otra de violencia. Eso no es un proyecto, eso te sirve para un rato, pero no para generar una convicción duradera del horizonte predictivo que tenemos las personas. Es una lucha por el monopolio del horizonte predictivo de la sociedad. El horizonte predictivo es cuando te despiertas, saber que vas a hacer. Y que va a hacer tu hijo, y tu esposa , y tu hermano, que has pensado para el día siguiente, o el siguiente mes o los próximos seis meses. Es algo concreto, no una abstracción filosófica: como las personas prevén su destino inmediato. Cuando no puedes dirigir eso, como esta sucediendo ahora con las fuerzas conservadoras, se da este proceso caótico”.

Cristina graficaba lo mismo diciendo que el neoliberalismo en el poder nos desorganizaba la vida. Y así fue, y hoy continuamos igual. Sin horizonte predictivo nuestras vidas son un caos. es lo que ofrece el sistema tal cual esta hoy.

Hacia la pospandemia necesitamos parir una comunidad donde todos y todas tengan un trabajo digno y bien remunerado. ese es el piso del que hay que partir. No saber que vas a comer mañana, o si me van a echar cuando se levante el decreto de la prohibición de despidos, no es vida. Es caos. tenemos la oportunidad histórica de hacerlo.

Pero retomemos la tercer certeza que plantea Cristina en su carta: “Por eso el problema de la economía bimonetaria que es sin dudas, el más grave que tiene nuestro país, es de imposible solución sin un acuerdo que abarque al conjunto de los sectores políticos, económicos, mediáticos y sociales de la República Argentina. Nos guste o no nos guste, esa es la realidad y con ella se puede hacer cualquier cosas menos ignorarla”. Con todo el amor y la gratitud que uno le tiene a Cristina me permito disentir con que el problema del dólar es el principal de la economía argentina, sino que es una consecuencia de la estructura económica neoliberal que tiene nuestro país desde hace mas de 40 años.

Pero para romper esa estructura de la desigualdad se necesita primero ver el problema y segundo, juntar fuerza social que enfrente a esos sectores minoritarios y mezquinos que son el verdadero poder real del país aunque pasen los gobiernos.

Volvamos por ultima vez a García Linera: “Si vas a acercarte para hacer negocios con el sector privado, tienes que acercarte con un Estado fuerte, no con un Estado mendigo. Porque sino te conviertes en funcionario de ese sector económicamente poderoso. Si el Estado no tiene poderío económico, la autonomía relativa del Estado no funciona. Lo que tienes es una subordinación general del estado al gran funcionamiento de la economía, porque son los sectores concentrados, los que van a definir sin hay o no inflación, si hay o no empleo, si hay o no inversión. Para ser progresista, un gobierno tarde o temprano tiene que darle una potencia económica a las estructuras del Estado”

Linera Peronista. Clarito como el agua. Terminemos el apartado nuevamente con Juan Perón y una frase super conocida, pero no por eso menos importante y real: “La economía nunca es libre, o la controla el Estado en beneficio del pueblo, o la controlan las corporaciones en perjuicio de este”.

 

O inventamos o erramos

“Un toke por si las moscas van, y otro toque por si vas detrás,
ya no hay tiempo de lamentos, ya no hay más!”
Patricio Rey y sus redonditos de ricota, Toxi-Taxi, La Mosca y la Sopa (1991)

Con la derrota del proyecto popular en el año 1976, muchas cosas cambiaron en nuestro país, pero quisiera hacer foco en un punto estratégico que tuvo la dictadura cívico-militar: la destrucción de la clase obrera como factor político central en la vida nacional. Hoy seguimos pagando dicha derrota a pesar de los avances y retrocesos que nos dimos como clase en los años de la democracia.

Para desarmar la fuerza política, social, organizativa y cultural que había construido la clase obrera argentina en casi más de un siglo de luchas, había que derrotarla física y materialmente, cambiando su estructura interna.

Resumiendo, lo que hicieron las clases dominantes fue una reconversión industrial, concentrando y centralizando el capital en grandes empresas, fundiendo a las medianas y pequeñas, reduciendo el numero de obreros industriales hasta dejar el mínimo indispensable, también apoyándose en un cambio tecnológico. (de 1976 a 1982 la clase obrera industrial vio reducido su numero en 300.000 trabajadores). Esto generó un traslado de fuerza de trabajo hacia el sector de servicios y del Estado y también comenzó la desocupación en serio.

Sobre este combo se bajan salarios, se terceriza y se intenta des-sindicalizar a los trabajadores.

La estructura neoliberal que dejó la dictadura, de concentración económico-financiera, fue sostenida y profundizada con la democracia de los 80 y los 90. A fuerza de hiperinflación e hiper desocupación, la gran patronal argentina, siguió atomizando al movimiento obrero, para acrecentar sus márgenes de rentabilidad y quitarle peso político en la estructura en el único movimiento que podía y puede hacerle frente: El peronismo.

Comienza a pensarse la política, no ya en términos de “clase”, es decir desde un colectivo de intereses, sino en términos mas individuales, de “ciudadanos”, “libres e independientes”

La política y la militancia comienzan a “profesionalizarse”, se comienza a vivir como si fuera una carrera por los cargos y se ve como una salvación individual. El peso que los trabajadores y los humildes tenían en las estructuras políticas y partidarias comienza a mermar en detrimento de lo que se llama “clase política” hegemonizada política y culturalmente por sectores de la clase media argentina.

Mientras toda esta metamorfosis política ocurría, Saúl Ubaldini expresaba la resistencia de los trabajadores al neoliberalismo, canalizada a través de la CGT, pero ya con unas 62 organizaciones (rama política del sindicalismo peronista) muy debilitadas. El cafierismo y el menemismo como expresión de esa “clase política” ya eran hegemónicos al interior del movimiento.

Lo mejor de la CGT de Ubaldini se insertó en el MTA con Hugo Moyano y el “bocha” Palacios a la cabeza, que junto a los movimientos de trabajadores desocupados y a la CTA, resistió al ajuste y a la entrega del país durante los años 90 hasta llegar a la rebelión popular del 2001. Pero todo este sector social sigue siendo marginal en la política, a pesar de la fuerza social potente que representaba.

Con el kirchnerismo, y la recuperación del proyecto nacional, los trabajadores volvemos a tener peso “corporativo”, ya que se crean casi cinco millones de puestos de trabajo, pero en las estructuras del movimiento, sigue hegemonizando el sector de la “clase política profesional”, en sus distintas variantes.

En 2009 el intento de la Corriente Nacional del Sindicalismo Peronista y la Juventud Sindical fue valioso, pero terminó de la peor manera, es decir en el enfrentamiento de un sector del movimiento obrero con el gobierno nacional, debilitando a ambos y dando lugar a que el enemigo histórico saque ventaja de dicho enfrentamiento. Fueron cuatro años de macrismo.

Lo que quiero expresar con este pequeño derrotero histórico de este apartado, es que los trabajadores argentinos debemos dejar la queja para pasar a la acción.

Inventar, en el mejor sentido de la palabra. Hasta Mauricio Macri, en uno de sus últimos reportajes dijo que su gobierno comenzó a terminar con la movilización de los trabajadores en diciembre de 2017. Aunque sea un mamerto, tiene más conciencia de clase que muchos de nuestros dirigentes sindicales.

Si no recuperamos el protagonismo político como única fuerza social que puede tener un programa de salvación nacional que contenga a todos los otros sectores sociales que tienen contradicción con el enemigo histórico, el gobierno no podrá avanzar para resolver los grandes problemas nacionales.

La forma política organizativa que nos demos los trabajadores (y acá hablo de ocupados y desocupados, es decir CGT y UTEP), pero con la certeza que es indispensable crear una suerte de nueva 62 organizaciones al interior del Frente de Todos, sin romper la unidad, pero planteando un rumbo de profundización, con medidas estructurales de corte nacional y popular.

Y no hablamos solo de cargos, sino de fuerza social organizada por abajo, en las organizaciones libres del pueblo que supimos crear, con debate y que tenga su correlato en las dirigencias que expresen este sentir de las bases.

El 17 y el 27 de octubre pasado mostraron la voluntad de ir por más de un sector mayoritario del pueblo. Falta encontrar la herramienta política de los trabajadores, dentro del Frente Nacional para llevar a cabo estos anhelos tan nobles de nuestro pueblo.

Es momento de inventar o errar, pero así no se puede seguir. La próxima conformación de la CGT tiene que tomar estos debates que se vienen dando tanto en las regionales como en las bases como reguero de pólvora.

(*) Delegado Envases del Plata (ex-Camea). Integrante de la Agrupación metalúrgica José Ignacio Rucci, UOM seccional Morón.

Tags: Agustín ColovosApuntes para la militanciadelegadoPirañaUOM
Compartir130Tweet82EnviarEnviar

Relacionados

Conflicto en Vassalli: “Los ánimos están re caldeados”

Conflicto en Vassalli: “Los ánimos están re caldeados”

29 septiembre, 2025
Panorama sindical. Mascotas

Panorama sindical. Mascotas

28 septiembre, 2025
Panorama sindical. Choreo

Panorama sindical. Choreo

31 agosto, 2025
Panorama sindical. Militancia

Panorama sindical. Militancia

17 noviembre, 2024
Ball Corporation: Despidos, persecución y contratación de chilenos hospedados en hoteles de lujo

Ball Corporation: Despidos, persecución y contratación de chilenos hospedados en hoteles de lujo

12 noviembre, 2024
Panorama sindical. Eva

Panorama sindical. Eva

28 julio, 2024

Discusión acerca de esta noticia

  • Facebook
  • Twitter
  • Instagram
  • YouTube
  • WhatsApp
  • Telegram
  • TuneIn
  • Se viene el gran festival por los 20 años de Radio Gráfica

    Se viene el gran festival por los 20 años de Radio Gráfica

    613 compartidos
    Compartir 245 Tweet 153
  • Apiladas Deportivas: AFA Play y la pulseada del Fútbol Argentino

    356 compartidos
    Compartir 142 Tweet 89
  • El Peronismo es lo que es, un partido Liberal

    238 compartidos
    Compartir 95 Tweet 60
  • Fuentes Seguras. Nord Stream, la energía y la representación

    230 compartidos
    Compartir 92 Tweet 58
  • Galeno ART: Casi 500 puestos de trabajo en riesgo

    218 compartidos
    Compartir 87 Tweet 55

Categorias

  • 80 años
  • Ciencia y Tecnología
  • Ciudad
  • Comunicación
  • Comunicado
  • Congreso
  • Conurbano
  • Cultura
  • Deportes
  • Derechos Humanos
  • Documento
  • Economía
  • Elecciones
  • Elecciones 2021
  • Elecciones 2023
  • Elecciones 2025
  • Entrevista
  • Géneros
  • Gremiales
  • Historia
  • Institucional
  • Judiciales
  • Medio Ambiente
  • Medios de Comunicación
  • Mundo
  • Opinión
  • Peronismo
  • Peronismo 80 años
  • Podcast
  • Política
  • Provincia
  • Radioteatro
  • Salud
  • Sin categoría
  • Sindicalismo Internacional
  • Soberanía
  • Sociedad
  • Solicitada

Visitas

Temas

alberto fernandez CGT Coronavirus COVID-19 FMI Fuentes Seguras Horacio Rodríguez Larreta pandemia Panorama sindical principal

Radio Grafica FM 89.3 © 2021. Todos los derechos son del pueblo.

Diseñado por IT10 Informatica y Telecomunicaciones

  • Política
  • Gremiales
  • Sociedad
  • Mundo
  • Deportes
  • Cultura
  • Opinión
  • Grilla
  • ¿Quiénes Somos?
  • Historia
  • Comunidad RG
  • Contrataciones
  • Contacto

Radio Grafica FM 89.3 © 2021. Todos los derechos son del pueblo.
Diseñado por it10 Informatica y Telecomunicaciones