Por Leonardo Martín
El Consejo del Salario, integrado por organizaciones gremiales, empresariales y representantes del Gobierno, se reunió en la tarde del jueves para definir el aumento del Salario Mínimo, Vital y Móvil. Previsiblemente, no hubo acuerdo entre las partes por lo cual terminará definiendo la suba el Ministerio de Capital Humano en forma unilateral.
La CGT y ambas CTA habían acordado una postura común para llevar a la reunión que se hizo en forma virtual, como viene ocurriendo en el último período. El planteo fue una suba del SMVM a 482 mil pesos a julio y 505 mil pesos en agosto. Actualmente está en $234.315.
Por su lado, el sector empresarial ofreció una módica, insignificante, suba para el próximo cuatrimestre. Llevarlo a $245 mil en julio, $253 mil en agosto, $259 mil en septiembre y $264 mil en agosto. Una propuesta para que no haya acuerdo.
La concepción del SMVM es para una persona sin carga de familia, pero dado los números actuales ni siquiera dan para la subsistencia de una persona. El Gobierno de Milei comenzó con un salario mínimo de 180 mil pesos hasta llegar a los 234 mil pesos en medio de una estampida inflacionario por muy encima de esa actualización.
Para tener como referencia, una Canasta Básica Total medida por el INDEC para una familia tipo, cuatro integrantes, fue $873.169 para el mes de junio y de $393.319 para no caer bajo la línea de indigencia.
En las dos actualizaciones previas del SMVM no hubo acuerdo, o mejor dicho hubo acuerdo entre el sector empresarial y el Gobierno, terminando laudando Capital Humano con subas por debajo de la inflación.
Vale recordar que la suba del SMVM también impacta en otros programas sociales como la Asignación Universal por Hijo (AUH), Programa Acompañar, Progresar, Potenciar Trabajo y en una franja de jubilaciones que se actualizan de acuerdo a esa suba.
Participaron por la CGT Héctor Daer, Carlos Acuña, José Luis Lingeri y Rodolfo Daer; por la CTA Autónoma lo hicieron Ricardo Peidró, Alejandra Angriman, Omar Giuliani y Luis Campos y por la CTA de los Trabajadores Hugo Yasky y Claudio Marín.
Ricardo Peidró de la CTA Autónoma declaró tras la fallida reunión: “esto es una farsa que va en línea con la política de este Gobierno que es sacrificar el salario, establecer una economía absolutamente detenida, sin avances. Pero no son efectos indeseados de las políticas del Gobierno. El congelamiento de los salarios, tanto en sectores formales como informales, o de jubilados y jubiladas, es un efecto deseado, y de esa manera se logra una transferencia de ingresos desde los sectores más vulnerables hacia los sectores económicos más concentrados”.
Por el lado de la CTA de los Trabajadores manifestaron que hubo un “boicot” y calificó como “insensibilidad empresarial”.
“Con el valor actual pasamos a ser parte de los tres países con el salario mínimo más bajo de América Latina. Esta insensibilidad empresarial y de las autoridades de gobierno explica los 18 puntos de indigencia y el crecimiento del desempleo que se acerca a los dos dígitos. Por eso repudiamos la burla del sector empresario que propuso la vergonzosa cifra de 264.500 pesos a cobrar en el mes de noviembre”, expresaron desde la central que conduce Hugo Yasky.
EVOLUCIÓN DEL SALARIO MÍNIMO, UNA CAÍDA BRUTAL
Días atrás fue publicado un estudio del CIFRA de la CTA de los Trabajadores donde le pone números a la brutal caída que tuvo el SMVM en los últimos años.
Solo durante el gobierno de Javier Milei, para ser más precisos desde noviembre pasado, la caída fue del 32,1%. Abriendo un poco más la lupa el derrumbe es del 43% respecto a diciembre de 2019 y 56,4% respecto al mismo mes de 2015.
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