Milagro Sala, presa política desde 2016 y líder de la organización barrial Túpac Amaru, dialogó con María Laura Morales y Mario Sadras acerca del proyecto de ley para intervenir el Poder Judicial de Jujuy, el cual señaló funciona a conveniencia del gobernador Gerardo Morales.
Destacó que la iniciativa presentada por Federico Fagioli, Natalia Zaracho e Itai Hagman, diputados del Frente Patria Grande que integran el bloque del Frente de Todos, “es muy importante para los jujeños, porque en la provincia no tenemos una justicia que represente al pueblo, sino que responde directamente a Morales. Quien no quiere responder a él, se lo saca con un juicio político o se lo obliga a renunciar”.
En ese sentido, enfatizó que “el proyecto no es para liberar a Milagro Sala, sino para que de una vez por todas recuperemos la verdadera democracia judicial en la provincia” ya que se criminaliza y persigue al que reclama contra el oficialismo jujeño, lo que lleva a que “varias organizaciones y sindicatos estén llenos de causas”.
Dentro de las irregularidades que existen en el proceder del poder político en Jujuy, puso el foco en la figura de “Luis Martín, ex gendarme, actual ministro de Seguridad, que tiene varias denuncias de pinchar teléfonos y de apretar a opositores. Me animo a darte el número con el que están pinchando los teléfonos:+541151009255. Te lo pinchan a cara descubierta. Hicimos la denuncia en 2018. Lamentablemente no tenemos respuesta”.
Para graficar su negativo peso en la vida social de la provincial, recordó que hace un tiempo “un grupo de organizaciones sociales cortaron una ruta, los mandaron a reprimir y detuvieron a diez. A pesar de que los metieron a la cárcel, a un muchacho y una chica les quemaron el auto en la puerta de la casa como para decirles ‘no te metas con nosotros’. Eso desde hace mucho tiempo que no se veía en Jujuy. Luis Martín maneja la Federal, maneja Gendarmería, y sigue apretando a los compañeros, nadie puede opinar contra Morales”.
Sala añadió que el responsable de la seguridad jujeña actúa “de la mano de Sergio Lello Sánchez, jefe de fiscales, que está denunciado por violencia de género por mujeres que trabajan con él. Es la misma persona que nos llenó de denuncias y Morales lo quiere llevar al Superior Tribunal de Justicia de Jujuy”.
Analizando la realidad de su distrito, destacó que a pesar de que “Jujuy es una provincia rica, con muchísimos recursos, con negocios muy grandes como el litio, la marihuana, la basura, el azúcar, el tabaco, los jujeños no vemos nada de esa recaudación. Somos los primeros en pobreza y endeudamiento. No hay trabajo, todo está caro, no alcanza la plata para vivir”.
La presa política expuso que en Jujuy “hay muchísimas movilizaciones todos los días. Morales decía que no me iba a dar la libertad porque la provincia iba a ser un caos, pero a pesar de que estoy presa igual es un caos”.
“Queremos una Argentina para todos, no para unos cuantos”
De cara al 25 de Mayo, fecha histórica en la que participará del Encuentro Patriótico que se realiza en Vicente López, reflexionó: “Queremos una Argentina para todos, no para unos cuantos. No queremos división. Queremos que la redistribución de la riqueza vaya para los que menos tienen. Queremos discutir la pobreza con los responsables. Queremos que Macri vaya preso porque se robó toda la plata del Fondo Monetario Internacional. No solo él, sino todo su gabinete. Que vayan presos los que robaron a nuestro país. Macri está libre porque tiene la banca de la Embajada de Estados Unidos. Morales también puede hacer lo que se le canta porque tiene su venia”.
En relación al devenir de la gestión del Frente de Todos, expresó que “Alberto Fernández agarró el país destrozado después de los cuatro años que Macri gobernó. Hay que sentarse a discutir cómo salimos de este pozo en que estamos los argentinos. Hay que trabajar y unificar todos los sectores porque sino la derecha te come. La derecha demuestra que está peleada pero en los momentos de elegir presidente se juntan todos. La embajada estadounidense da una orden y hacen caso”.
“Hace dos semanas me operé la pierna y me pusieron una prótesis, estoy con un andador. Mi marido tiene cáncer, a veces está bien y a veces mal. En el transcurso de estos seis años perdí una abuela, una tía. Se me está yendo la familia y yo sigo acá encerrada. Se están yendo los que más amaba. No es una situación fácil pero sigo firme, sigo adelante, no voy a bajar los brazos. No por mí, sino por la militancia y por los compañeros” concluyó Milagro Sala, quien lleva más de seis años privada de su libertad.
- Entrevista realizada en Desde el Barrio (lunes a viernes de 10 a 13)
- Redacción por Marcos Maldonado
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