Por Erika Eliana Cabezas *
Disputas territoriales, pasiones, bailes y freestyle. Jóvenes jugándose la vida en el día a día, y la violencia institucional que no cede. Una realidad conocida puesta en tensión con el clásico shakesperiano. Bailan las almas en llantas de Pilar Ruiz parte de una experiencia personal para, luego, derivar en una versión libre de Romeo y Julieta. “Escribo sobre cosas que modifican mi estar en el mundo”, confiesa la autora y directora de la obra para Radio Gráfica.
“En el 2014 viví una situación con un estudiante de la escuela pública donde trabajaba que me generó cierta pulsión de escritura. Yo daba clases de teatro en inglés en una escuela de Chacarita. Era una primaria para adultos donde asistían muchos y muchas adolescentes que estaban recién cursando la escuela primaria. Muchos y muchas venían de la villa de Fraga. En esa experiencia, tuve un estudiante que un día nos dijo que se iba de la escuela porque había tenido una situación de violencia institucional con un policía, que le dejó dicho que la próxima no se la dejaba pasar. Había entrado en una suerte de amenaza con la Metropolitana. Por eso, la madre decidió sacarlo del barrio y pidió el pase de la escuela”, cuenta
A diferencia de la versión original, la historia de Valu y Julio no ocurre en Verona sino más bien en el playón del barrio. Sí hay prohibición. Sí hay deseos desenfrenados de consumar ese amor vedado. “Cómo procedimiento de distanciamiento decidí que la situación dialogue con Romeo y Julieta, en una versión muy libre, porque yo voy tomando decisiones”, manifiesta Pilar, y posteriormente explica su elección.
“Se me armaba algo en relación a la imagen del destierro. Este estudiante sufrió una suerte de destierro en su vida, y se tuvo que ir del barrio por una persecución policial. Dando clases a adolescentes, también me pasaba de sentir muy presente la pulsión en relación al goce, el deseo, los no límites. Algo que creo que tiene Romeo y Julieta. Más allá de toda la cuestión del amor romántico, son dos adolescentes con una pulsión de deseo imparable”, aclara.
La dramaturgia está hecha en verso y rima, se complementa con las gorras de los pibes del barrio. “La decisión tiene que ver un poco con reivindicar lo popular. De hecho este estudiante, que se llamaba Julio, trapeaba en mis clases. Hay algo de ese espíritu de él que está en la obra. Me pasaba mucho que, en el buen sentido, para manipular la clase siempre me negociaba. ‘Hacemos la escena de teatro en inglés y después trapeamos un rato’, decía, y a mi me encantaba escucharles trapear. Él hacía las letras y dos compañeros, la base. A la vez, el verso y la rima distanciaba el habla de los personajes de la coloquialidad con la que podían hablar. Me interesaba generar un distanciamiento de ese universo, para dejar de manifiesto todo el tiempo la ficción”, afirma.
En Bailan las almas en llantas hay marginalidad, drogas, robos y violencia institucional. También, una fuerte reivindicación de la cultura popular. Están Romeo y Julieta reversionados en los personajes de Julio y Valu. Están, muy solapadamente, las vivencias de Pilar.
“Hay algo de reconocerme como sensible al mundo que me rodea, y desde esa sensibilidad dejar que las cosas me atraviesen y poder reescribir un poco desde ahí, que fue lo que me pasó con Julio. En concreto, esa situación me atravesó mucho y, de algún modo, sabía que algo iba a hacer con eso en términos artísticos. Porque para mí el arte viene un poco a eso, a generar formas de pensamiento, abrir preguntas, mover fibras y abrir sensibilidades hacia otros lugares”, asegura.
Ficha artística-técnica
Actúan: Camila Conte Roberts, Daniel Begino, Federico Martínez, Fran Bert, Jesús Catalino, Joaquín Gallardo, Juan Tupac Soler, Lola Banfi, Matías Méndez, Romina Oslé.
Entrenamiento físico y diseño coreográfico: Andrés Molina
Diseño de vestuario y escenografía: Victoria Chacón
Música original y diseño sonoro: Gastón Poirier
Diseño de iluminación: Lucía Feijoó
Fotografía y video: Francisco Castro Pizzo
Diseño gráfico: Juan Pablo Rodríguez
Prensa: Marisol Cambre
Producción ejecutiva: Poética Resiliencia y LugarOtro.
Asistencia de dirección: Milagros Vera
Dramaturgia y dirección: Pilar Ruiz
(*) Periodista de cultura de Radio Gráfica
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