Trabajadoras del cuero, con eje en la industria y mirada de género

Por Úrsula Asta y Paloma Garrido*

“El sindicato es el espacio que tenemos las trabajadoras para plantear nuestros problemas. Pero no el sindicato concebido como ´ahí tenés la Secretaría de la Mujer que se ocupa de todas estas cosas´ y que nos asignen esos roles para que en realidad no estemos en los espacios de poder. Sólo el 18 por ciento de las conducciones nacionales de los sindicatos están compuestas por mujeres. Y de ese 18, casi el 80 por ciento está ocupado por mujeres en lugares feminizados…´Te pongo ahí, así no jodés, mientras nosotros los varones, en la mesa chica, de la que no participás, decidimos la política gremial que hacemos´. O nos dan la Secretaría de Acción Social, porque ¿vieron que nosotras tenemos un don especial para entregar paquetes de pañales?”.

Entre risas y con ironía, pero en un mensaje claro y profundo, las palabras de Patricia Mounier, secretaria nacional de Derechos Humanos del Sindicato Argentino de Docentes Privados, formaban parte del debate y la reflexión del 1° Encuentro de Trabajadoras del Cuero por la Integración Latinoamericana.

Y siguió, para levantar a quien había sido una de las organizadoras del encuentro: “También tenemos que romper en los ámbitos gremiales ese patriarcado que piensa que servimos para hacer los centros de mesa de la cena del día del trabajador. Porque el discurso, el escenario y el micrófono lo tienen los compañeros. Salvo que llegués, en un acto de la CGT en medio de la 9 de Julio, a manotear un micrófono y, como saludaron en masculino, una compañera se anime a sacarle el micrófono al compañero y salude a LAS COMPAÑERAS TRABAJADORAS (aplausos). Esa compañera de la que hablo, cuando era más joven, también sufrió situaciones de discriminación. Y eso, lejos de amedrentarla, la llenó de fuerzas para luchar por lo que veía que les ocurría a todas las mujeres. Obviamente estoy hablando de la queridísima Claudia Lázzaro”.

A LAS TRABAJADORAS LES DA EL CUERO

Claudia es parte de la mesa nacional de las Mujeres Sindicalistas de la Corriente Federal de Trabajadores de la CGT y es la secretaria de Género y Derechos Humanos del Sindicato Único de Obreros Curtidores (SOC). Desde el encuentro realizado en el camping de la Federación Argentina de Trabajadores de la Industria del Cuero y Afines (FATICA), en Exaltación de la Cruz, explicó a Radio Gráfica que este era un espacio de “formación político sindical de las mujeres”.

“Esto que estamos haciendo es una unidad de clase, que es la unidad del trabajo. No importa si a mí circunstancialmente me tocó ser obrera y a otra compañera, capataz. Lo importante es que el trabajo organiza nuestras vidas y el ser mujeres sindicalistas tiene que ver con el trabajo”, dijo Lázzaro. Había trabajadoras nucleadas en el Sindicato Único de Obreros Curtidores, el Sindicato Argentino de la Manufactura del Cuero, el Sindicato Obreros Marroquineros, el Sindicato de las capatazas S.E.C.E.I.C., el Sindicato de curtidoras de la Rioja, SECALAR; y la Unión de Obreros Curtidores de Uruguay.

Fueron convocadas a exponer mujeres sindicalistas y políticas, que ocupan lugares de conducción y decisión. Todas confluyeron en una afirmación: no es nada sencillo para una mujer acceder a estos lugares. “Necesitamos un Gobierno que venga a poner en eje el trabajo y la producción. Y cuando pensamos en esta clave de futuro, pensamos que el próximo gobierno tiene que ratificar el Convenio 190 (de la Organización Internacional del Trabajo, OIT) que habla del acoso y la violencia laboral. Y también lo pensamos con la participación de las mujeres en ese gobierno, tanto en el trabajo, en los lugares de mando, en los lugares de conducción y también vamos a discutir el futuro del trabajo”, sostuvo la curtidora.

“Y también lo pensamos con la participación de las mujeres en ese gobierno, tanto en el trabajo, en los lugares de mando, en los lugares de conducción y también vamos a discutir el futuro del trabajo”

En el ámbito de la política, por primera vez asistimos a elecciones con la ley de paridad, es decir, igual cantidad de varones y mujeres. La mixtura entre esta conquista y el fuerte impulso de organización de las trabajadoras, se vió entonces plasmado en lugares en las listas representando al movimiento obrero: allí ingresaron las mujeres sindicalistas. Varias de las que expusieron eran, entonces, además de gremialistas, candidatas políticas. Asistimos así a la oportunidad histórica de que los reclamos de las militantes trabajadoras de toda la vida sean visibilizados, trabajados y debatidos en el Congreso.

HACIA UNA POLÍTICA DE CUIDADOS CON EJE EN EL TRABAJO

Algo quedó claro en los distintos paneles: las mujeres sindicalistas impulsarán fuertemente la agenda de debate sobre las tareas de cuidado no remunerado. “Cuando los varones van a una entrevista de trabajo, les preguntan por su capacitación para el mismo. Cuando las mujeres vamos a una entrevista, nos preguntan si tenemos hijos”, se dijo en los paneles de debate.

La brecha de desigualdad ubicada en el 30 por ciento es consecuencia de una inserción laboral más precaria en relación a menor trabajo registrado, de puestos de trabajo con salarios más bajos y de la dedicación al trabajo reproductivo no remunerado para las mujeres, quienes ocupan el doble de horas diarias que los varones a las tareas de cuidado, dedicación que crece en detrimento de las mujeres cuando en los hogares hay niños o niñas a cargo.

Un ejemplo concreto, aunque de ninguna manera forma parte de todo el universo que implica el trabajo no remunerado: hoy en día, si hay personas enfermas en el hogar o si hay que realizar la adaptación en el jardín, entre tantas otras; esas tareas recaen casi exclusivamente en las mujeres. En esa línea, también se destacó la necesidad de impulsar la creación de guarderías en los lugares de trabajo, así como mejorar el sistema de licencias, aunque no solamente.

“Cuando los varones van a una entrevista de trabajo, les preguntan por su capacitación para el mismo. Cuando las mujeres vamos a una entrevista, nos preguntan si tenemos hijos”

“El futuro tiene que ver con un país industrializado, con producción, pero que ponga el acento también en las tareas del cuidado, en la economía del cuidado, en esas tareas que las mujeres, para poder acceder a otros cargos, necesitamos que haya políticas públicas que la integren, y que nos abracen a todas. El Congreso y el próximo Gobierno lo tiene que atender y esto tiene que ver con sacar del closet las tareas de cuidado. Por ejemplo, necesitamos licencias, pero no sólo para las mujeres, sino para los varones”, marcó Lázzaro. Y por esa senda transcurrieron algunas de las voces que integraron el panel de cierre: “Las trabajadoras frente al futuro del trabajo. Cooperativismo. Economía del cuidado y seguridad social”.

Allí estuvo Virginia Franganillo, embanderada en el peronismo feminista y una de las impulsoras del origen del Consejo Nacional de la Mujer creado en los 90, y hoy devenido en Instituto Nacional de las Mujeres, organismo rector en políticas públicas de género en nuestro país. Ella habló del “derecho a ser cuidado” y destacó la organización intersindical de las trabajadoras durante estos cuatro años del macrismo, sobre la cual aseguró que “es la garantía” para que “el próximo gobierno en su agenda y en el centro de su programa de gobierno, estén las políticas de cuidado”: “Así que yo voy a decirles gracias a estas nuevas sindicalistas”.

Entonces bien, si ser cuidado y cuidada es un derecho, el Estado debe tomar medidas y diseñar políticas públicas con el fin de garantizarlo. La concejala de Almirante Brown y candidata a diputada nacional María Rosa Martínez sostuvo: “El cuidado no más como una cuestión secundaria. El cuidado como aliado para encender la economía, como dice Alberto, porque además el cuidado va a significar trabajo cooperativo para construir espacios de cuidado, va a significar remuneraciones que generan movilidad económica”.

“El futuro tiene que ver con un país industrializado, pero que ponga el acento también en las tareas del cuidado, en la economía del cuidado; en esas tareas que las mujeres, para poder acceder a otros cargos, necesitamos que haya políticas públicas que la integren”

El exministro de Trabajo y actual legislador porteño, Carlos Tomada, quien también estuvo presente en el cierre, sostuvo que “la ejemplaridad del movimiento feminista fue también uno de los aportes sustantivos a la construcción de esa unidad”. También contó que presentó un proyecto de ley en la Legislatura en torno a políticas de cuidado y manifestó que debió haber impulsado en su gestión la necesidad de que hubiera mujeres tanto trabajadoras como empresarias en las mesas paritarias. “Estoy seguro de que, si hubiera habido mujeres en esos lugares, se habrían instalado temas que de otra manera quedaron postergados”, afirmó.

Formaron parte de ese panel, Carlos Daniel Bico Pastorini de la Unión de Obreros del Cuero de Uruguay y Walter Correa, diputado nacional y secretario general del SOC, quien saludó el encuentro y planteó que, en el camino de debatir y construir, el 27 de octubre se enviará el telegrama de despido a este gobierno. Soledad Alonso, la secretaria de Prensa del sindicato de Anses SECASFPI y candidata a diputada provincial manifestó lo propio: “Las mujeres luchamos porque haya un nuevo plan de inclusión previsional argentino”. En la misma mesa, Andrea Viget de Federación de Cooperativas de Trabajo Unidas, FECOOTRAUN Mendoza, sostuvo la necesidad de una Ley de Cooperativas y la propuesta de que “todas las viviendas sociales sean construidas por cooperativistas”.

HISTORIA, POLÍTICA, SINDICALISMO

“Empezamos a ser parte de la historia de FATICA, porque este es un encuentro fundacional de trabajadoras del cuero, siguiendo a las grandes luchadoras, como es angelita, que es nuestra máxima referente mujer dentro de la federación. Ella, aparte, había sido Secretaria General de Manufactura del Cuero”, reivindicó Claudia Lázzaro desde un encuentro que había comenzado con un partido de fútbol entre el equipo de las obreras curtidoras y el equipo que dio el debate sobre la visibilización de las futbolistas consagrando el 21 de agosto como su día. “Tuvimos el honor de contar con las Pioneras del Fútbol Femenino, que son compañeras trabajadoras marroquineras”, sonrió la curtidora.

“Este es un encuentro fundacional de trabajadoras del cuero”

La amalgama de debates transcurrió en paneles con experiencias concretas y demandas históricas. Así, múltiples voces representando historias de Latinoamérica, como Uruguay, Colombia y Cuba; de distintas provincias del país; provenientes de diferentes centrales sindicales y también de la economía social, nutrieron este Primer Encuentro de las Trabajadoras del Cuero por la Integración Latinoamericana.

Sobre “Participación sindical y política como herramienta de transformación”:

Los discursos de Alejandra López, candidata a diputada nacional y Secretaria General de SADOP Capital y de Olivia Ruiz, secretaria de previsión social de la CTA Autónoma.

https://twitter.com/RadioGrafica893/status/1167969844945272832

Maria Reigada, del SUTEBA, CTA provincia de Buenos Aires y candidata a senadora provincial y Roxana Itati Piriz, de la Federación de Trabajadores de la Economía Social, Fetraes.

https://twitter.com/RadioGrafica893/status/1167972871655673858

Sobre “Discriminación, violencia y acoso en el mundo del trabajo”:

Mara Rivera de APSEE, personal superior de empresas de energía, y Alicia Meynard, de la CTA provincia de Buenos Aires.

https://twitter.com/RadioGrafica893/status/1167957018507825153

Patricia Mounier de SADOP Nación y Claribed Palacios, Sindicato de Trabajadoras Domésticas de Colombia (UTRASD).

https://twitter.com/RadioGrafica893/status/1167962759767552003

Sobre “Sindicalismo latinoamericano y políticas de género”:

Ana Cubilla, secretaria general del Sindicato Único de Obreros Rurales (SUOR) y Juliana Marino, ex embajadora en Cuba.

https://twitter.com/i/status/1167892809489117185

Entrevista completa a Claudia Lázzaro:

https://www.facebook.com/grafica893/videos/2472005102848214/

*Integrantes del programa Feas, Sucias y Malas, sábados 10 a 12 hs por Radio Gráfica.