La imágenes de la represión se viralizaron rápidamente en redes sociales por el grado de violencia policial. Villa Río Bermejito, localidad ubicada en el norte de la provincia del Chaco, fue el escenario de una represión que dejó medio centenar de heridos y detenidos. Los manifestantes realizaban una protesta sobre la Ruta Nacional N° 11 cuando recibieron el ataque.
Johanna Duarte, dirigente de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) y oriunda de Chaco explicó: “la protesta es consecuencia del ajuste brutal que viene desarrollando el Gobierno nacional con Milei y en la provincia del Chaco con su cómplice y empleado, el gobernador Leandro Zdero. Está golpeando muy fuerte en los sectores populares, aún más en el Chaco profundo y sobre todo en las comunidades originarias que desde hace meses vienen reclamando cuestiones básicas como el acceso al alimento y el acceso al agua”.
Otro elemento que viene afectando a las comunidades es el “corte de pensiones no contributivas que era el único ingreso para muchas de esas personas que integran un sector que estaba totalmente excluido, invisibilizado y estigmatizado”.
“Villa Bermejito está en el límite con Formosa, era una concentración pacífica que pretendía visibilizar esas bajas arbitrarias. Presentaron documentación pero le negaron la restitución”, añadió.
“La represión fue brutal con perdigones de goma, fue una cacería. El intendente Omar Reis fue el que dio la orden de reprimir en un operativo que tuvo 400 efectivos policiales. Desplegaron un aparato represivo en donde el propio jefe de policía fue a provocar”.
Las imágenes mostraron a los manifestantes con balazos de goma en diferentes partes del cuerpo e inclusive en el rostro. Había personas mayores y menores en el lugar que fueron afectados.
“Fue un reclamo legítimo en una situación de crisis que se está desbordando”, concluyó Duarte.
LA RESPUESTA DEL GOBIERNO DE CHACO
La Gobernación de Chaco, encabezada por Leandro Zdero, de origen radical y aliado de Javier Milei, acusó a los manifestantes de “militantes kirchneristas” que agredieron a la policía.
“A pesar de que el intendente local mantuvo una instancia de diálogo y atención con los manifestantes, un sector reducido optó por la violencia: arrojaron objetos contundentes e intentaron avanzar sobre el cordón policial, provocando lesiones en agentes que cumplían con su deber de resguardar la seguridad y la libre circulación”, indicaron en un comunicado.
Para empeorar la comunicación agregaron: “El Gobierno del Chaco expresó su solidaridad y reconocimiento a los policías agredidos, destacando su profesionalismo, templanza y compromiso para controlar la situación.
Asimismo, el Ejecutivo reafirmó que la provincia no permitirá el regreso de los cortes ni los hechos violentos que afecten la convivencia democrática”.










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