Por Nehuén Gusmerotti *
La sirena del punk, cómo eligió autodefinirse en esta nueva etapa artística, estrenó su cuarto disco de estudio. Se trata de Un Mundo Pequeño, un recorrido de nueve canciones que alternan entre el hardcore, el punk y las baladas pop melódicas, condensando un momento de madurez compositiva muy interesante en Marina Fages. Este disco viene acompañado de un gran momento en términos de convocatoria y reconocimiento en la industria musical. En este marco nos reunimos para charlar con ella en una cervecería palermitana.
Comenzamos compartiendo sensaciones sobre este nuevo disco lanzado el 28 de julio en plataformas digitales. “Son canciones que pasan por varios estilos. Desde hardcore punk a la música experimental”, expresó Marina sobre la esencia del álbum. “Traté de trabajar con distintos climas y conceptualmente gira alrededor del mundo pequeño. La intimidad, el mundo interno de una persona, la tapa gira un poco en torno a eso. Afuera el mundo está en llamas y yo comiendo pollito en mi casa”, agregó en una analogía minimalista con el contexto en que estamos insertos. “Me gustan muchos géneros y creo que justamente el contraste entre sabores hace que pueda sentir lo salado en contraposición con lo dulce. Abordo el trabajo artístico de esa forma”, compartió finalmente sobre la mezcla de momentos que recorre el disco.
Para El Mundo Pequeño, Marina fue productora de sus propias canciones. “Es un ejercicio interesante. Es como curarse a una misma”. Fages toma distancia de sus propias canciones durante el proceso, para decidir sobre lo que pide la música sobre sus propios deseos iniciales. “La composición sucede varios meses antes. Está la génesis, y después va pasando el tiempo. Las cosas se atrasan. Así vas logrando la distancia para escuchar las canciones de otra forma, viendo conceptualmente que necesitaba el tema. No lo que yo tenía ganas de hacer, sino lo que necesitaba para que lleguen a un lugar. Por suerte tuve tiempo para probar cosas y decidir que pase tal o cual cosa”, explicó sobre este proceso.
Marina trabajó en la música de otros antes de dedicarse a desarrollar su propia carrera, eso le dio espalda y experiencia para abarcar varios frentes de su proyecto. “Cuando por fin me animé a hacer mi música, tenía un conocimiento bastante grande, fue mucho más fácil hacerlo para mí que para otras personas. En ese sentido, al tener una idea clara, hay un montón de situaciones y dudas que no tengo. La contra es que de repente querés hacer mil cosas y no te da el cuerpo, el tiempo o el dinero. Seguimos negociando con Marina Fages, ja”, expresó sobre la idea del hazlo tu mismo y la gestión independiente.
El último tiempo ha sido positivo en términos de difusión y espacios para tocar en la carrera de la artista punk. Telonear a Metallica, participar en el KEXP, el Primavera Sound, entre otros, son postas que ayudan a difundir su obra. “Estoy re contenta. Es algo que se fue dando gradualmente y lo estoy viviendo. Estoy agradecida y dispuesta a seguir haciendo cosas”, compartió Fages que viene de presentar el disco en Niceto y tendrá una nueva cita en vivo el 17 de noviembre en Matienzo.
Intérprete y seguidora del punk, Fages abordó el revival que está teniendo el género en el público. “A mí me encanta, está volviendo la música que hice siempre y está buenísimo. Creo que es una respuesta natural a los años de trap que vivímos. Es una escena hermosa punk, que aún no es main y bautizan under, es un natural devenir. Fueron un par de años de mucho auto tune y mucho hi-hat. Es orgánico, veo natural que ahora los chicos quieren escuchar distorsión, baterías y cosas más crudas”, expresó sobre esta respuesta social que se hace carne en las nuevas bandas que cobran relevancia en la escena.
Una de las aspiraciones de Marina en este momento de su carrera es convertirse en Guitar Hero. “Hace unos meses decidí que quiero entrar en la dinámica del Guitar Hero. Estoy ensayando un montón, quiero técnicamente tocar bien y estoy laburando mucho con eso. No prometo que vaya a salir bien, pero le estoy poniendo mucha garra, ja”, se adelanta en la previa del show del 17 en Matienzo. “Siempre me flashó la interacción del público con una banda. Y quiero que esas cosas pasen en mis shows. Que el show seamos todes”, agrega no solo sobre este show en particular sino sobre su forma de encarar las presentaciones en vivo.
Sobre la temperatura del público en vivo, Fages contó cómo compartió en primer término estos temas. “Hay canciones que las empecé a tocar sola en una gira que hice el año pasado por las provincias. Ahí medí la temperatura y por ejemplo me dí cuenta que “Aguardiente” tenía que ser el corte. Fue como ver que pasa, sin la banda, solo ver qué pasaba con esas canciones. Sobre todo, una gira en Cuyo que probé cosas nuevas, en algunas me quería matar pensando porqué me mandaba así. Pero me di cuenta que algo pasaba. Suelo hacer eso, pruebo algo sola y veo que pasa. Si me defiendo sola, con la banda es un desconche”, contó en relación a las primeras muestras en vivo de sus canciones nuevas.
El año que viene encontrará a Marina presentando este nuevo disco que tendrá que defender sobre las tablas. “Me gustaría presentar el disco viajando. Ir un poco más lejos”, exclama en la tarde porteña. La fuerza de su proyecto está en vivo, ya sea frente a una armada de metaleros recelosos, o frente a una horda que se cansó del auto tune y quiere suciedad punk. Marina desde su mundo pequeño, los conquista a todos.
(*) Conductor de Resistiendo con Ideas (Lunes a viernes de 20 a 21 horas)
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