Las cooperativas agrarias de Fecofe apoyan la intervención de Vicentin

En diálogo con Úrsula Asta*, Rossi sostuvo la necesidad de una Vicentin con el Estado presente, las cooperativas y los trabajadores. “Que entre todos hagamos una gran empresa de carácter nacional, rectora del mercado de los granos y alimentos”, auguró. La Federación que preside, en Rosario, está conformada por varias cooperativas acreedoras de Vicentin y que pertenecen a diferentes provincias. Forma parte de un núcleo central de interés sobre el devenir de la empresa.

¿Cuál es tu visión de los últimos acontecimientos?

-Me parece que esta nueva intervención es una alternativa, que suma a la provincia de Santa Fe. Me parece que está bien porque la provincia de Santa Fe es una parte muy interesada en el tema, y está bien que trabaje en conjunto con la Nación para que todos podamos tener la información y saber qué es lo que ha pasado, qué es lo que está pasando ahí adentro, eso es fundamental. Y también tomarnos un tiempo y ver cómo puede ser la salida.

Nosotros insistimos en que el Estado tiene que estar presente en el mercado de los granos, en el mercado de los alimentos, controlando, observando, promocionando y garantizándole a todos transparencia. Y los privados, en este caso el cooperativismo, tenemos que estar a la altura de las circunstancias para poder hacer de esto una gran empresa que genere trabajo y que deje fundamentalmente la riqueza en el país, que es lo que no ha pasado en los últimos tiempos.

Tuvieron una reunión con Omar Perotti, ¿qué pudieron dialogar? ¿Ahora el panorama cambia un poco para ustedes?

-Para nosotros no cambia mucho porque veníamos observando esta situación. Obviamente no sabíamos lo del fallo del juez, pero sí del esquema de que la provincia quiere participar, de que nos pidan opinión acerca del tema, que las cooperativas podemos ser protagonistas, estar asesorando u opinando y también dando una mano para que la empresa Vicentin, con esta nueva intervención, pueda trabajar. Que los trabajadores de Vicentin, que están pasando días difíciles, de angustia, de incertidumbre, puedan tener un horizonte y que las plantas de etanol, de aceite, puedan funcionar.

Para eso hace falta materia prima, que el cooperativismo puede aportar, en el marco de un acuerdo serio y responsable, y también empezar a dar alguna certidumbre a los acreedores. Fundamentalmente a los acreedores mas pequeños y mas necesitados, como pueden ser los productores o algunas cooperativas.

“las cooperativas podemos ser protagonistas, estar asesorando u opinando y también dando una mano para que la empresa Vicentin, con esta nueva intervención, pueda trabajar”

Ustedes desde Fecofe plantearon desde un principio la importancia de incidir en esta intervención como sector cooperativo. Contanos cómo es Fecofe, cómo está conformada y cómo sería su incidencia en este nuevo Vicentin.

Nosotros somos una federación de cooperativas, es decir, una cooperativa de segundo grado, conformada por cuarenta cooperativas asociadas y distribuidas en diez provincias del país, con producciones diversas. Hay un grupo de cooperativas asociadas que son las agrícolas-ganaderas tradicionales, que comercializan los granos de sus productores, ya sea soja, trigo o maíz, les venden sus insumos y le prestan servicios de transportes y asistencia técnica. Después, hay otro grupo de cooperativas que avanzaron en la cadena de valor y agregan valor a esa misma producción y hacen alimentos balanceados. Y otros que se animan un poco más y llegan con sus productos a las góndolas, como son cooperativas lácteas, arroceros, de jugo, de vinos, de dulces.

Tenemos diversidad de cooperativas asociadas, además muchas de nuestras cooperadoras son acreedoras de Vicentin. Es por eso que desde un primer momento empezamos a opinar y a ponernos en contacto con las autoridades en este tema. Veníamos solicitando la intervención del Estado desde antes que sucediera y ahora creemos que podemos hacer nuestro aporte a la nueva empresa que se vaya a constituir, teniendo en cuenta que no solo estamos hablando de granos y de commodities, sino que también es una empresa que tiene una producción de alimentos, donde nosotros podemos opinar y podemos ser parte de una empresa de carácter mixto, con privados y con el estado presente.

“muchas de nuestras cooperadoras son acreedoras de Vicentin”

Hay un sector que muchas veces pareciera tomar la voz en la prensa masiva y a través de movilizaciones. Un sector agropecuario que se expresa, como lo conocimos, en contra. ¿Por qué sucede eso? ¿Crees que ese sector opera en un intento de marcha atrás?

-Yo lo dividiría en dos. Hay una parte de la dirigencia que dirige poco y juega a la especulación mediática y a la partidaria política, que es la dirigencia que conforma la mesa de enlace. Si bien los dirigentes individualmente se diferencian, como mesa de enlace dejan mucho que desear y representa muy poco a mi sector, pero sí tienen un impacto mediático importante. Por otro lado, están los productores, que en una posición mayoritaria manifiestan la desconfianza con el Gobierno nacional y tienen sus razones de ser así. Hay una historia de desencuentros que no los acerca. Ha habido un paro anunciado por la mesa de enlace hace un par de meses atrás por el tema de aumento de retenciones. Nosotros propusimos una segmentación en esas retenciones que el Gobierno anunció, pero que nunca cumplió, y esas cosas son las que hacen que los productores le tengan desconfianza a este Gobierno y a otros también.

“hay una parte de la dirigencia que dirige poco y juega a la especulación mediática y a la partidaria política, que es la dirigencia que conforma la mesa de enlace”

En particular, este Gobierno hace pocos meses que comenzó, pero no va generando esa confianza necesaria para que una medida de estas características sea apoyada como debería serlo por los productores. Porque esta medida, si sale todo bien, para lo cual nosotros estamos trabajando, viene a transparentar el mercado de los granos, viene a hacer que a los productores les paguen lo que les tienen que pagar a un precio justo y no que esté en manos de un par de empresas multinacionales. Esto, insisto, en definitiva, viene a mejorar la posición de los productores y paradójicamente los productores se paran enfrente por una amenaza, pero fundamentalmente por desconfianza, que es la palabra que maneja la economía y que maneja los mercados agropecuarios.

Los productores hemos confiado en Vicentin, en entregarle la mercadería y que después nos iba a pagar, cosa que no sucedió y cuando se rompe la confianza es muy difícil poder dialogar, llegar a acuerdos. Eso pasa entre la política y los productores. La mesa de enlace juega a otra cosa, hay una irresponsabilidad muy grande, no hay una propuesta clara, hablan de la propiedad privada porque según ellos defienden la propiedad privada de Vincentin. Nosotros también defendemos la propiedad privada, ahora la propiedad privada de nuestros productores, de nuestras cooperativas. La propiedad privada en la Argentina es mucho mas avasallada por otras empresas privadas y concentradas que por el Estado.

“La propiedad privada en la Argentina es mucho mas avasallada por otras empresas privadas y concentradas que por el Estado”

En este sentido, ¿crees que es necesario que quienes estaban a cargo de Vicentin, y que además están siendo investigados por posibles delitos, se vayan lo antes posible?

-Sí, claro. A medida que vamos conociendo mas información de como han manejado la empresa no tiene sentido que continúen al frente de la empresa. Lo que sí tiene sentido es que la justicia pueda actuar y trabajar libremente, para explicar lo que ha pasado ahí adentro para que los que tengan que pagar, paguen y que toda la sociedad lo sepa.

Recién hablabas de la empresa mixta, ¿crees que es el mejor esquema para el futuro de Vicentin que sea una empresa mixta entre YPF Agro y las cooperativas, con la participación de trabajadores? ¿Cómo de debería ser esa Vicentin?

Sí, de esa manera. Que este el Estado presente, que estemos las cooperativas y los trabajadores pudiendo tener su palabra, y que entre todos hagamos una gran empresa de carácter nacional, rectora del mercado de los granos y alimentos.

También mencionabas a los espacios carterizados y la contribución que realizan las cooperativas, además de su propio trabajo. Hablando de alimentación, uno habla también de soberanía, que implica poder tomar las decisiones en torno al sector de los alimentos para la población argentina y controlar otras cuestiones, por ejemplo, el comercio exterior y las divisas. ¿Cuál es el esquema que pensás que debería funcionar? Te he leído hablar de control social, ¿qué significa eso?

-Control social significa que más actores estén presentes. En el día de ayer (por el viernes) tuve una reunión con una cooperativa canadiense y vamos analizando modelos que sirven en otros países para poder extrapolarlo a la Argentina, con nuestras características y nuestra cultura. Nosotros pensamos en una cooperativa de múltiples sectores que funciona muy bien en Europa, en Canadá, en Estados Unidos. El sector agropecuario es un modelo que puede ser superador para nosotros, donde están sentados los consumidores en cooperativas de consumo, los trabajadores, los productores y el Estado. Es un modelo que se puede hacer.

El control social significa que la información esté disponible, que todos sepamos lo que pasa ahí dentro, que la empresa sea competitiva en el mercado interno y en el internacional. Se hace en otros lugares del mundo y acá se puede hacer. Argentina tiene técnicos muy capacitados, managment y gerenciamiento acorde para eso. Se puede llegar a un control que garantice que esto funcione bien.

Fecofe está en la Federación Agraria Argentina, ¿allí igualmente hay distintas posiciones?

-Sí. Nosotros nacimos en Federación Agraria, no somos asociados pero sí de la familia. Claramente la Federación Agraria está pasando por un momento difícil, es una entidad decaída y hay distintas posiciones. Nosotros en esta familia de la Federación Agraria estamos articulando muy fuertemente con AFA, Agricultores Federados Argentinos, la cooperativa de primer grado mas grande del país y vamos elaborando propuestas conjuntas, trabajando en equipo.

La venta y comercialización de granos es algo a discutir en medio de una situación tan difícil, de tanta hambre en la Argentina y en medio de este debate vinculado a la soberanía alimentaria, ¿cuánto hay para hacer allí?

-Hay que empezar, estamos muy lejos. Cuando el Presidente lo nombra dijimos por fin se habla de este tema en el país, por fin se lo aborda, por fin podemos empezar a trazarnos un plan en ese sentido. Lo que primero necesitamos es la seguridad alimentaria, que todos los argentinos coman. Un país productor de alimentos, los exportamos al mundo, y que haya hambre es inmoral. Tenemos que hacernos cargo todos de hacer lo que nos toca y primero solucionar ese problema que es urgente y, luego, ir hacia la soberanía alimentaria que no es ni mas ni menos que ser dueños los argentinos del alimento que se produce y se comercializa.

“Lo que primero necesitamos es la seguridad alimentaria, que todos los argentinos coman”

Estamos lejos de eso, porque hoy está en manos de unas pocas empresas, la mayoría multinacionales y no tenemos decisión sobre el tema, ni opinión. Este es un primer paso que ojalá salga bien. Y tenemos que continuar discutiendo todos estos temas porque, a partir de esto, se abre la difusión de lo que te estoy planteando: en manos de quién está la comercialización de los alimentos y de los granos, en manos de quién esté la tierra y de ahí empezar a pensar un país distinto, en el que haya más distribución, más productores y no menos, mas ocupación del territorio y no tanta concentración. Para eso tiene que haber una política clara, que la tenemos que construir entre las organizaciones y la dirigencia intermedia tiene que cumplir un rol menos mediático y más de trabajo, y el poder político también.

¿Lo de fallo te preocupa? ¿Crees que se puede dificultar el camino hacia la intervención de Vicentin?

-Esto es un proceso que tiene muchas vueltas y que no es sencillo. Hay muchos intereses nacionales y multinacionales. Muchos intereses como los nuestros para que la cosa suceda bien e intereses para que la cosa no suceda. Quieren mantener la concentración, que nadie los vigile y poder seguir haciendo lo que quieran y esos intereses juegan su papel, su rol, están muy inquietos y muy preocupados también. Entonces, va a tener idas y vueltas.

Sobre lo de ayer (por el fallo que restituye a directivos de Vicentin), me parece bien que la provincia de Santa Fe intervenga, que haga equipo con el Gobierno nacional es una buena noticia para nosotros. Esta semana nos reunimos con el gobernador Perotti  y manifestamos junto con AFA la intención de colaborar con todo el proceso, que va a llevar tiempo, pero que esperemos el final sea positivo.

*Entrevista realizada en Feas, Sucias y Malas (sábados de 9 a 12 hs por Radio Gráfica).

• Redacción por Julia Campalans