La próxima temporada de la B Nacional está en debate. Hay diversos proyectos para cambiar la forma de disputa del mismo. Los equipos metropolitanos no quieren viajar al interior por cuestiones de costos. Por su parte, los clubes de las provincias también tienen sus proyectos. En Abrí la Cancha entrevistaron a Leonardo López, vicepresidente del club Independiente Rivadavia de Mendoza, y autor de uno de los cinco proyectos en disputa.
Para el dirigente mendocino “sería muy egoísta que en el próximo Nacional B los clubes de Buenos Aires no viajen ya que nosotros lo tendríamos que seguir haciendo. Esta categoría nació y creció con la federalización del fútbol argentino y tenemos la categoría más completa“.
López, secretario de la Mesa de la B Nacional, expresó: “yo creo que es momento de dejar de priorizar la zona metropolitana. Pero acá la discusión es otra: no hay que achicar la categoría por costos, sino generar más recursos. Tenemos que buscar esos recursos y hacer un campeonato más profesional en todo sentido”; y también remarcó la necesidad de eliminar los promedios de descenso: “una de mis metas es eliminar los promedios. El promedio genera es que haya clubes que hacen un colchón de puntos y al otro campeonato hacen la plancha especulando. Ya estamos viendo como cayó el nivel del Nacional B. Sin promedios, el peligro de descenso es constante. Eso hace al campeonato más competitivo y obliga a los clubes a mejorar institucionalmente”.
Consultado por Carlos Aira sobre el mejor formato para la segunda división, el dirigente manifestó: “el campeonato ideal es de 25 equipos. De ahí hacemos seis descensos para no seguir sumando y llegar en 2021 a los 22 equipos que debería tener la divisional para ser atractiva para la televisión“; consultado sobre si es viable un campeonato de 40 equipos dividido en dos zonas, una Metropolitana y otra Interior, López expresó: “Como le planteé a la Comisión de Torneos, no tengo problemas solo que en algún momento se junten las dos zonas, sino estamos tirando por la borda tantos años de federalismo y lucha desde el Interior para ser igualados con el fútbol de Buenos Aires. Como decimos, Dios está en todas partes pero atiende en Capital Federal”.
Finalmente, el directivo de Independiente Rivadavia dio cuenta de las necesidades de la divisional: “no podemos bajar el nivel de la competencia. Hay que profesionalizar del todo la divisional. No veo con malos ojos si se les da licencia a equipos para que tengan cierta capacidad en sus estadios y un número básico de socios. Por ejemplo, Estudiantes de San Luis llegó a tener 35 socios. No digo que sólo compitan clubes con veinte mil socios, pero si con ciertas características que muestren gran profesionalismo“.
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